Sasha la mecánica

Esa perrita que acabas de ver anteriormente se llamaba Sasha de raza San bernando... Nombre puesto por mi familia, ella era una perrita de dos meses de nacida, mi padre visitó un garaje de un amigo suyo que era mecánico y tenia varias crías de una perrita San bernando, llegó a nosotros porque el dueño de el garaje le habló a mi padre sobre las perritas, le decía que estaban demasiado sucias, plagadas de pulgas y que el no las va a poder tener mucho tiempo ahí, mi papá le insistió que le regalara una, él señor cedió y se la dio, cuando llegó a mi casa estaba demasiada descuidada, estaba literalmente plagada de pulgas, súper sucia, no sabíamos como estaba de salud, imaginamos que estaba muy mal, ese mismo día que nos la dieron la llevamos al veterinario a que la inspeccionara, y le dieran una ducha junto a unos medicamentos para eliminarle las pulgas.

Bueno, la teníamos demasiado bonita, muy limpia y la cuidábamos demasiado. La historia que vengo a contar es la siguiente... Mis padres creían que yo era muy ingenuo (tenía 10 años de edad) y Sasha desgraciadamente había fallecido , me imagino que fue por causa de el descuidado que tuvo anteriormente, ya había agarrado alguna enfermedad o alguna cosa, bueno el caso es que un día yo llegué a mi casa después de mi colegio y no estaba Sasha, mis padres me dijeron que estaba en casa de mi abuelo (Cosa que era una gran mentira) y que mañana la iban a buscar, llegó el día de mañana, yo fui a clases y cuándo llegué de clases vi que estaba una perrita San bernando, el caso es que esta era más grande y pues me di cuenta , yo al instante sabía que esa no era mi perra, bueno, no me quisieron decir la verdad hasta que en la noche le digo a mi mamá: "Mamá, júramelo que ella es Sasha", se le empezaron a aguar los ojos y me dijo que no, que era otra, y que Sasha había fallecido, me puse demasiado triste, empecé a llorar y no les hablé a mis padres porque estaba muy molesto con ellos porque me querían mentir, amaba a esa perrita.

Aunque tampoco iba a despreciar a la que trajeron, a ella la apodé Sazha en honor a Sasha, la crié y ella si vivió, estuvo muy feliz con nosotros y mis padres la regalaron porque vivía en un edificio, yo acepté porque era demasiado grande para que se quedara con nosotros en el edificio y pues, se la regalamos a un tío que vivía en una casa, tenía patio donde divertirse y imagino que ella allá ahorita es muy feliz.

Historia corta pero que quería contárselas a todos ustedes.