Me gustaría añadir el ascenso gradual del sentimiento antipólitico que ha sido un mal reciente en nuestra joven Nación, y que se ha agudizado en las ultimas décadas (más que justificable al ver los excesos en que incurren quienes detentan hoy el poder). Sin embargo es necesario aclarar hasta el cansancio que el actual régimen NO representa (particularmente creo que nunca lo hicieron) el valor de lo político y mucho menos ejerce lo que su razón de ser, y es servir a la Nación que representa.
Superado este oscuro paréntesis en nuestra historia, es menester revaluar la concepción que tenemos sobre el ejercicio político y como ser artífices de su correcto funcionamiento.

Graciosos artículos.
Saludos