Los jovenes que se quedan en Venezuela, son los músicos del Titanic

Este articulo lo escribí hace un tiempo ya, unos 4 años aproximadamente, lo escribí, para desahogarme en ese momento, hoy revisando mis archivos me lo tope, y decidí compartirlo con todos ustedes, la crisis, se agudiza, el barco se hunde cada día más.

Hace poco recibí los títulos y certificados de varios estudios de 4to nivel que realice no hace mucho, y no es por nada, pero hoy por hoy, no puede ser posible que un profesional con estudios y ansias de superación gane mucho menos que un taxista, un obrero e inclusive un buhonero sin ningún ánimo de menospreciar a ninguno de estos oficios que bien está claro dignifican a los que laboran en ello, pero hay que ser justo, una persona que dedico y dedica gran parte de su vida a los estudios no puede ser echado a un lado, solo porque no milita en un partido político, esa gran cantidad de mentes brillantes simplemente han sido puestos a un lado por un régimen solo por no militar o compartir su visión política, lo cual ha generado que muchos puestos sean ocupados solo por militancia política y no por meritos, esto aunado a una ejecución de una filosofía política errada, fallida y fracasada en todos los rincones del mundo, ha socavado no solo las bases democráticas de este país, (que a mi modo de ver ya hace rato no existen) si no también el sector productivo y por ende el sector económico, beneficiando solo a los que ostentan el poder en perjuicio no solo del pueblo que se le opone, sino también al pueblo que los apoya, es muy triste porque han usado la ignorancia y el desconocimiento de las mayoría para su propio beneficio, es lamentable ver como a esos hermanos Venezolanos son manipulados como títeres solo para mantenerse ellos en el poder, son como los perros que se sientan debajo de la mesa, esperando que caigan migajas para comer, es simplemente un pueblo que vendió su dignidad, y hoy por hoy puedo hacer una analogía que me parece muy adecuada a lo que estamos pasando en el país; en este barco llamado Venezuela está ocurriendo la misma historia que le paso al tristemente célebre titanic, el pueblo comunista o manipulado por el sistema podemos decir que son los maquinistas y los que viajaban en clase económica, el motor del país fue lo primero en zozobrar y le seguirá la clase económica, ellos no tienen como escapar pero no lo saben y eso que el agua ya la llevan casi al cuello, las clases media alta y alta ya desde hace mucho tiempo se montaron en los botes salvavidas (se fueron del país) los de clase media buscan y corren como locos buscando un salvavidas, y en todo ese caos, están los músicos tocando, (que a mi parecer somos los estudiantes y jóvenes profesionales) y allí estamos nosotros los jóvenes, tocando música en un barco que naufraga, saliendo a trabajar y estudiar en un país que no nos ofrece ningún tipo de futuro, y mientras seguimos tocando nuestros instrumentos en medio del caos, anarquía y la frustración de todos, nosotros seguimos tocando melodías de esperanza, aun a sabiendas de nuestro negro y lúgubre destino, la verdad es que los que decidamos quedarnos tenemos que tener claro que esto no tiene salida pacífica alguna y que llegara el punto de quiebre en el que o guerreamos o nos resignamos a un triste destino, está claro, Venezuela naufragara y eso no lo puede evitar nadie, es hasta necesario que esto pase, el que no me cree, que agarre un tobo y comience a sacar agua, y que luego me cuente si logra algo, pero luego será hasta mejor reunir a los sobrevivientes en una nueva Venezuela que intentar salvar esta, se que suena un poco rudo, pero tendrá que ser así, es inevitable, cada Venezolano ha sellado su destino en este barco y la culpa de sus desgracias presentes, pasadas o futuras no pueden ser achacadas o remitidas a nadie más, una nueva Venezuela deberá contar con mucha disciplina, educación y formación de Valores, y esto tendrá que ser adoptado no solo por el gobierno de transición, si no por los venideros gobiernos sean del tinte o ideología política que sea, la única esperanza es la lucha, la salía no es pacifica y la cicatriz que esto podría dejar en millones de Venezolanos será profunda, amarga y traumática, pero a la vez altamente necesaria para madurar como pueblo y pasar a ser ciudadanía. Para finalizar me llena de profunda tristeza y desasosiego los 2 rumbos futuros que podría tomar el país, siendo uno de ellos una guerra civil violenta, sangrienta, dolorosa y larga y por otra parte una dictadura comunista, militar, tiránica y opresora, siendo las 2 igual de perversas, la única diferencia será que en una moriremos de pie y en otra de rodillas, cada uno de ustedes elija la que prefiera.