Me gusto mucho tu articulo muy completo, en mi opinión estudiando los dos puntos de vista ninguno la tiene fácil ni el inmigrante ni el que se queda. El inmigrante si comienza de cero, le toca adaptarse a un país con una cultura, leyes, comida diferentes, trabajar en lo que uno consiga porque a donde vas no te conoce nadie, te pega la nostalgia porque estas lejos de las personas que quieres, a veces no puedes comunicarte con tu familia porque no hay internet, no hay luz o hasta puede que el único celular que tenían se daño y te toca ingeniártelas y son muchos factores los que contribuyen a que emigrar no es nada fácil. Pero también y hablo como inmigrante nosotros las personas que estamos afuera enviamos y ayudamos a nuestros familiares que así tengan 3 empleos no pueden costearse los artículos básicos que necesitan, también hay personas que les ha fallecido un familiar y allá en Venezuela ni siquiera pueden cubrir los gastos y ha sido un familiar que esta fuera que ayuda. Y a las personas que están todavía en el país, si les digo que a ellos también les pega la nostalgia, hay muchas familias separadas por esta misma crisis y eso trae muchas consecuencias en todos los sentidos, la escasez de agua, transporte, internet, luz, entre otros. Pienso que hay que tener mucha paciencia y tratar de ver el lado positivo de las cosas. Nuestro país tiene que cambiar y volver a ser el de antes, se que costara pero así va a ser. Y ese día estaremos todos reunidos para que esto solo sea una experiencia que contar.
gracias por compartir tu historia, y si la verdad no es nada fácil ni para los que se van, ni para los que se quedan , y ciertamente los que nos quedamos contamos mucho con la ayuda de los se van, sobre todo si nos toca una situación tan dolorosa como afrontar la partida de un familiar, ya que aquí se ha vuelto un lujo morirse, pero aun así pienso que Dios es un Dios de ultimo socorro y de algún lado siempre traerá la provision. Doy un aplauso a esos jóvenes valientes como tu que muchas veces a tan corta edad asumen responsabilidades que no les corresponden, perdiéndose de muchas actividades y experiencias acordes a su edad, como culminar sus estudios, porque simplemente les toco acelerar sus etapas y asumir roles que aun no le competen.