Una enseñanza de vida.
El tigre - Venezuela
Viernes, 01 de Junio del 2018.
Observa los anaqueles, solo quedan estantes vacíos.
Observa el transporte público, está colapsado pero aún así toca enfrentarlos.
Observa los bienes, ya no hay lujos.
Observa las tragedias, le pasan a cualquiera y actualmente, muy seguido.
Observa el colapso del país durante 6 años.
Y ahora recuerda.
Recuerda cuando la diversidad de productos abundaban.
Recuerda cuando la comida se botaba porque sobraba.
Recuerda cuando se tomaba un taxi para cualquier trayecto.
Recuerda cuando se compraban celulares de lujo.
Recuerda los pequeños problemas que surgían y parecían todo un desastre.
Recuerda cuando la felicidad estaba presente.
Venezuela es un ejemplo más de una tragedia. Ese tipo de situaciones que forman a cualquier persona, que hacen madurar a cualquier población y que es fundamento para las decisiones a tomar.
Es un claro ejemplo de lo complejo que somos los seres humanos y de como podemos sobrevivir con lo más simple. Es un ejemplo de las cosas que realmente importan en esta vida. Es una bofetada al ego de algunos. Es superación en su más agitado concepto.
Ya no se trata de viejas glorias. Y no puede tratarse de un futuro del cual no existe percepción por la abundante incertidumbre. Es acerca de un presente que presenta un panorama escaso de color y deficientes expectativas. Ya no es sobre los buenos ratos de días pasados, se trata de la realidad, en el sentido más conflictivo de la palabra. Una dura realidad que antes de hacernos débiles, debe ser la base de la fortaleza.
Gracias por leer.
Escrito por: Angel Coronado Duno
Nota: Es menester entender que la crisis prolongada es motivo suficiente para hacer tambalear la integridad de cualquier persona. Y aunque no se refleje, la tasa de suicidios ha aumentado en Venezuela dejando en evidencia lo difícil que se ha vuelto la constante humillación hacia los venezolanos y hacia la humanidad en general.