Una semana

UNA SEMANA

Hoy, después de un 1 años y 7 meses empieza la cuenta regresiva de una simple semana para volver a estar tus brazos.

Después de aquel fatídico 16 de diciembre de 2017, en exactamente una semana estaré de nuevo junto a ti, después de tanto, de lagrimas, de esperanzas y sueños rotos, de intentos y fracasos, decidimos tomar el toro por los cuernos y hacer las cosas a nuestra manera. Como dice el dicho “Si quieres que algo salga bien, hazlo tu mismo.”
Parece mentira que esta habitación que me dio luz y calor después de una de las más sombrías épocas de mi vida, hoy este llena de cosas para llevarte, de una maleta hecha y otra por hacer, parece mentira que tú allá te prepares para mi llegada. No puedo negarte lo que me acongoja el hecho de dejar a dos de los pilares mas fundamentales para mi en toda esta travesía, pero sé bien que no es mas que un hasta luego, para la simple idea de volver contigo a mi lado será una de las mejores cosas de mi vida.
Sé que con nuestro reencuentro muchos seres queridos se alegrarán con la noticia, porque nuestra felicidad es la suya.
Hemos sabido hacer frente a toda esta locura, a todo este maremoto de emociones, hemos sabido salir adelante y continuar con este amor tan bonito que nos tenemos, porque es ÚNICO E INIGUALABLE.
Quiero agradecer a la vida por haber puesto en mi camino alguien como tú.

Pero de lo que yo quería hablar es de la ansiedad que ahora me embarga, que ahora mismo con un cigarro en mano dreno, que ahora mismo escribiendo estas líneas intento para el run run que hay en mi cabeza. Como diría mi madre “intenta calmar ese mono loco que tienes en la cabeza” ¡Ay madre, si fuera tan fácil decirlo como hacerlo, ya hace rato lo habría hecho”

Emigrar es una de las cosas más difíciles que con mis 25 años he hecho.
El hecho de conocer nuevas culturas, tradiciones, palabras, costumbres es siempre enriquecedor pero cuando te vas escapando de un país, de un gobierno que te privó de las comodidades que por ley NATURAL, te corresponden es lo mas JODIDAMENTE DURO, que uno como ser humano puede hacer.

Empecé este texto hablándole a mi pareja, luego a mi y luego a quien sea que de casualidad llegue a leer estas palabras aquí plasmadas.

Soy fiel creyente de “A donde fueres has lo que vieres.” Sin perder mi forma de ser, mis costumbres, me gusta aprender, me adapté muy bien a este país que durante un año y siete meses llame “Hogar” pero realmente tu hogar es donde está tu corazón y entonces de ser así, mi hogar siempre estuvo donde estuvo él.
Sin llegar a menospreciar ¡OJO!

Bueno mi misión esta completada, creo que pude drenar parte de mi ansiedad, no del todo, creo que solo estaré tranquila cuando ya haya tocado suelo extranjero.

Si te da curiosidad toda mi historia, no dudes en comentar, en seguirme, estaré subiendo todo los por menores de toda esta travesía. Preparativos, salida, llegada entre otras cosas. Veamos que tal va todo esto.

Este es mi nuevo comienzo en el exterior.

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I’B