Carta a Mamá.

Catarsis.

Se que no vas a leer esto, pero qué más da, tampoco leíste las cartas que escribí en navidad pidiendo solamente que estuvieras conmigo.

Recuerdo lapsos dolorosos y traumantes donde yo te extrañaba sin siquiera conocerte, no sabia que era depresión hasta que un experto me lo dijo.
Recuerdo con dolor cada 10 de mayo, a pesar del ejemplo de mujer que estuvo conmigo, siempre quise estar contigo y abrazarte.
Cada día del niño esperé que llegaras a casa con una pelota para mi, un dulce o un abrazo cuando menos.
Han pasado 23 cumpleaños desde que te fuiste, y en cada uno de ellos me quedé dormido esperando tu llamada; siempre quise que soplaras conmigo las velitas y pedir juntos un deseo.
Los regresos de vacaciones fueron difíciles, mis amigos hablaban de sus aventuras con Papá y Mamá, y yo, pues bueno, yo nunca tuve nada que decir.
Muchos me preguntaron que si habías fallecido, no me avergüenza decir que en el pasado hubiera preferido que así fuera, saber que estabas bien y que no hiciste nada por mi fue algo que destrozó mi alma. Siempre preguntaban mis amigos por ti, pues nadie aquí te conocía, NADIE, ni siquiera yo.
Un día alguien llamó a la puerta y corrí para ver quien era, pero me enseñaron a no abrir a desconocidos, así que le dije a mi abuela que una mujer tocaba la puerta; “Es tu mamá” jamas lo olvidare, por que así te conocí.
Gracias por el dolor que me causaste, por las noches de lágrimas que no estuviste a mi lado, por las incontables pesadillas en las que no estuviste para calmar el miedo, por los momentos en que me llene de gloria y no estuviste para compartir mi alegría.
Gracias por enseñarme justo lo que no debo hacer, lo que no debo sentir y lo que no debo ser. Eres el mejor ejemplo de lo que no quiero para mi familia.
Gracias por no haber estado y por seguir ausente, te pido por favor que así sea hasta que los días de alguno de los dos termine, incluso ese día, en nuestro último momento, no quiero estar ni que tú estés, quiero que la distancia siga incluso después de la muerte.
Con cariño, tu hijo.

-Nany