Amamantar es una alimentación derivada del seno de una madre, es vital en los primeros 6 meses de vida de un recién nacido, contiene todos los complementos fundamentales para el desarrollo del niño y propiedades que protegen al bebe de diversas infecciones. Contribuye con el vínculo Madre-hijo ya que es una secuela del mutualismo entre ellos, su primera fase es en el periodo de gestación y el otro por supuesto la lactancia.

Muchas madres se ven obligadas a tener que trabajar mientras su hijo recién experimenta la vida, otras lo hacen por un pasatiempo para alejarse del niño algo que lo he detestado fuertemente ya que lo vivo en la sociedad. Este cambio es muy fuerte para el niño y para la madre, él bebe entra en un estado de melancolía y se siente abandonado.

Por mi parte he tenido 3 experiencias propias, la primera fue con mi hijo mayor, era madre primeriza y quería darle teta lo más que pudiera, por supuesto él acepto y fue así como mi primer hijo tomo leche materna hasta los dos años, cuando en su fiesta de cumpleaños dijo que ya no quería más teta, que él era un niño grande. Ese día llore y el me miraba con sus ojos diciendo que no quería más, no sé de donde se le metió esa idea en la cabeza, nunca le dije nada, pero insistió en nunca más tomar teta.

Mi segundo hijo le gustaba mucho su tetita, la agarraba fuertemente y nunca la quiso soltar, hasta que mi esposo lo operaron, tenía 3 años, su hermano y él se quedaron en la casa de mi mamá, duro una noche sin dormir porque nunca lo había hecho sin la teta pero a la mañana siguiente lloraba y lloraba pero quedo rendido, a la noche durmió bien y sin ningún estímulo que se asimilara a la teta. Allí decidí que era hora que dejara el pecho.

Mi último hijo nació 9 años después que mi hijo mayor y 6 después que mi hijo del medio pero aun así fue el más apegado de los tres, mi hijo duro con su tetita hasta hace unas semanas atrás a la edad de 4 años y medio. Se ha puesto muy mal, siente que no lo quiero quizás, pero ya va a la escuela y aun tomaba su tetita. Le he dicho de todo; “hay niños que no toman teta”, “tu primo no toma teta”, “ya tu teta no tiene leche”, “te la tomaste toda”. De todo, pero él sabe que se la quiero quitar, me he sentido muy mal, ya nadie se alimentara de mí.

En fin, los tres motivos de su separación de la lactancia han sido distintos, sus reacciones distintas y sus vidas ahora, distintas. Son niños extraordinarios pero evolucionan distinto. En fin, también enlazare a mi post algunos consejos para que tu hijo deje su teta sin ningún inconveniente, claro, cada niño es diferente pero hoy daré algunos tips que sean estándar (entre comillas).