El resentimiento.
A veces es difícil perdonar a quienes nos ofenden. Es fácil guardar rencor y depositar toda la responsabilidad de lo malo que nos pasa en factores externos, y después enojarnos porque esos factores externos (llámensele personas, circunstancias, situaciones fuera de nuestro control, etc.) no toman responsabilidad de arreglar nada, cuando, de hecho, es muy de esperarse que nadie ni nada se va a detener a solucionarnos la vida cuando nos sentimos mal, lo cual lleva muchas veces a actitudes autodestructivas (violencia, aislamiento, o comportamientos victimistas insufribles -ser un llorón-, adicciones, etc.)

"El orgullo no es el opuesto de la vergüenza, sino su fuente, la humildad pura es el único antídoto".
