La "vida artificial" de la mano con la vida natural

Mis cordiales saludos, estimados steemianos, en especial aquellos que sean amantes de la ciencia, como en #stem-espanol, #cervantes ciencia, #entropia y otras comunidades amigas de habla hispana. En esta oportunidad les traigo un artículo de divulgación comentando un asombroso hecho que afirma (y a la vez desafía) nuestra naturaleza: la creación de vida artificial.

La ciencia ficción nos ha provisto reiteradamente formas imaginativas de la inteligencia artificial avanzada, pero esta vez no se trata solamente de inteligencia o máquinas inteligentes con conciencia de sí mismas, sino de "vida artificial". La vida es generalmente definida desde un punto de vista biológico, pero es posible que pueda ser definida estrictamente como el producto de algunas determinaciones.

Precisamente, seguía recientemente el caso publicado en la revista Scientific Reports sobre la creación de vida artificial cuántica a través de la computación, lo cual me ha fascinado grandemente. Los científicos de la Universidad del País Vasco (España), protagonistas de este evento, han concentrado sus esfuerzos con miras a desarrollar un modelo computacional para la recreación en un ordenador cuántico de los procesos evolutivos darwinianos.

En concreto, han conseguido simular un par de organismos vivos representados microscópicamente a través de un algoritmo cuántico, apoyándose, claro está, de uno de los pocos computadores cuánticos existentes y que es propiedad de IBM. Con esta técnica han logrado emulan los más importantes procesos biológicos que todo ser vivo posee, tales como la autorreplicación, la mutación, la interacción entre individuos y hasta la propia muerte.

En este sentido, los dos "organismos cuánticos" se han comportado como todo ser vivo, por lo cual interactuaron entre ellos y hasta se reprodujeron, dando lugar a un tercer organismo. Este proceso se repitió cíclicamente, ¡hasta un total de 24 mil veces! De allí que, este experimento ha demostrado la validez de la teoría de la evolución de Darwin, puesto que se han reproducido exitosamente sus procesos, y lo ha hecho utilizando partículas subatómicas.

Como comenta el profesor Enrique Solano, uno de los investigadores involucrados:

“La vida es una característica macroscópica compleja que surge de la materia inanimada, mientras que la información cuántica es una característica de los bits cuánticos: objetos aislados microscópicos que ocurren en el universo de lo muy pequeño”.

Según se desprende del paper oficial, el próximo paso sería incrementar la cantidad de individuos artificiales, promover sus interacciones y desarrollar sus características. Precisamente, una cualidad biológica que potencialmente se quiere introducir es el sexo (o género) a los organismos, con miras a investigar más a fondo la "reproducción sexual" desde un punto de vista cuántico.

En lo personal, el hecho de que la mecánica cuántica sea productiva hasta para estudiar procesos de elevada complejidad como la vida misma, la hace una especie de "panacea" para los problemas de investigación interdisciplinarios. De hecho, lo cubierto en este post es tema de la "Biomimética cuántica", una disciplina heredada parcialmente de la ciencia de lo muy microscópico, como también lo es la "Computación cuántica"; temas para amplios debates e infinitos posts.

El post también nos invita a la reflexión sobre la definición de la vida misma y que si la vida artificial eventualmente llega a dejar los laboratorios para hacerse paso por sí misma, sería un paso gigantesco de nuestra parte como "especie creadora". Es algo así como los famosos "animales de tubos de viento", obras del científico y artista holandes Theo Jansen, cuyos vídeos en Youtube recomiendo encarecidamente. Él asegura que con su obra persigue la creación de una "nueva naturaleza". Quizá con todo el peso de la ciencia podamos conseguirlo.