El suicidio es real. La opresión, el desespero, el sufrimiento es real; y pocos lo reconocen. Una persona que de verdad va a cometer éste acto, siempre pide ayuda cuando se ahoga. Más que tristeza e indignación, veo ignorancia. Las personas están tan ensimismadas en su realidad que a veces ignoran las de otros; se enfocan tanto en ciertos problemas, que se olvidan que existen otros.
Éste relato es genial. Me ha movido la fibra sensible. Qué obra, mi bella Cath. Muchos besos para ti💖.
awwww que emoción que te guste, es mi primer relato de este tipo, me atreví a hacerlo y bueno es una realidad que está a la vista y pocos logran ver, es como dices tu, todos andan en su propio mundo. siento que debemos estar mas pendiente. Como siempre te adoro! un abrazo!