Vivir una experiencia musical en vivo es inigualable: tus sentidos se agudizan y te llevan a la euforia, tus vellos se erizan, tus pupilas se dilatan, y no puedes estar concentrado en nada más: sólo escuchar la música que amas y compartir tu alegría con la multitud. Así fue el festival Nuevas Bandas 2018.

Durante 2 días, el Teatro Chacao, en Caracas, fue el punto de encuentro donde se vivió lo mejor de la movida alternativa venezolana, a través de 14 bandas elegidas por circuitos regionales: NoMásTé, Esos… Cubos, Anakena, Los Delorean, La Fleur, Walking Like Ants y Bridges (Caracas), Drosera Capensis (Barquisimeto), Goe (Margarita), Pez Volador (Puerto Ordaz), Visión Real (Maracay), Frailes (Valencia), Zoller (Maracaibo) y Virtual Animal (Mérida), las cuales se disputaron el triunfo obtenido en el 2017 por la agrupación Le Cinema.

La edición número 28 del festival Trajo consigo un conglomerado de emociones al ritmo de la música. Aunque ambos días el rock se consolidó como el género dominante, 2 bandas destacaron por sus propuestas alejadas de este género: Anakena y NoMásTé, ambas pertenecientes al circuito Capital.

Un grupo sólo conformado por chicas que suenan a música latina, ska y un poco de Jazz: Eso es NoMásTé, el proyecto musical más variado de todo el Festival Nuevas Bandas. El público se levantó, disfrutó de sus bonitas letras y bailó. A la agrupación sólo le faltó agregar música venezolana para aumentar su versatilidad, y aun así fue suficiente para obtener una de las tres menciones especiales en el festival.

Por otro lado, Anakena, la banda ganadora, nos confirmó que es posible poner a bailar, al ritmo de la bachata, a un público predominantemente rockero. El sonido de Anakena también apunta a lo latino, pero se inclina más hacia el reggae, y sus letras se caracterizan por la jocosidad propia del venezolano, esta banda nos hizo feliz como “sanguchito de Diablito y Cheesewiz”, dirían ellos.

Llama la atención que las 2 bandas que se alejaron del rock fueron destacadas en el festival y, además, muy apreciadas por el público. En el resto de las agrupaciones predominó dicho género, resaltando las agrupaciones Frailes, de rock alternativo que experimenta un poco con lo psicodélico (y en cuya presentación fue cuidado cada detalle: vestuario, maquillaje, proyección, etc.), y Drosera Capensis, con su carnívoro rock stoner. Ambos grupos fueron merecedores de una mención especial.

Complicada tarea la de evaluar a los mejores exponentes de la música alternativa en Venezuela entre los 14 participantes, así que Héctor "Tito" Fierro (guitarrista de Los Pixel), Max Manzano (director de la Fundación Nuevas Bandas), Marco Santos (Locutor de Rock en Ñ), Fernando Bosch (guitarrista de la Pagana Trinidad) y José Ochoa (representante de Welcome Home Venezuela) fueron los escogidos para conformar al jurado que determinó quienes serían los galardonados.

Luego de saber quiénes serían los premiados, cerró la jornada la banda triunfadora de la edición 2017: Le’ Cinema. El público enloqueció a su entrada, se levantaron de sus asientos, corearon las canciones, e incluso un grupo se subió al escenario a mover los pies al ritmo del rock, y aunque el equipo de seguridad los bajó, seguro valió la pena, ¿no?

En el marco del festival nuevas bandas, también hubo exposiciones de vinil (cortesía de Caracas Calling), talleres (Music Business y Marketing Digital, dictado por el inglés Stephen Barnes e Introducción al Mundo DJ, dictado por la DJ Hyperaktivist) y se bautizó el libro ‘Conversaciones sobre Vytas Brenner’, recalcando así el legado del músico de origen alemán que fusionó rock con música venezolana en los años 70.

Llevar a cabo el Festival Nuevas Bandas es una gran celebración, así que los conductores del evento, Lorenzo Martínez y Manuel Ignacio Redondo, destacaron el gran esfuerzo realizado por la producción del evento en los últimos años. Ya que, desde hace 15 años, la organización piensa que cada edición será la última, pero siempre sumen el reto y superan los obstáculos.

Hace 28 años, bajo la dirección de Felix Allueva, nació el que es, hoy en día, el evento de música alternativa más longevo de Latinoamérica. Y, aún en el 2018, tanto tiempo después, se veía a Allueva de un lado para otro durante el festival, lo que nos habla del buen gentilicio venezolano: constante, trabajador, creador de realidades sustentables.

El Festival Nuevas Bandas nos deja mucho más que la música en sí misma, una lección importantísima: se debe persistir, seguir buscando cada talento anónimo del país, mostrar esos dotes ocultos en cada rincón de nuestros llanos, costas, montañas y ciudades. Y, ya que todos llevamos música en nuestro sentir, ¿Por qué no escuchar algo que salga de donde soy, de Venezuela?