Lo que le espera a tus siervos

En ocaciones el servicio al Señor es menospreciado, ya que hombres no vemos o no pensamos que podamos recibir lo que deseamos como hombres, pero me atrevo a decir que esto ocurre por ignorancia de no conocer lo que Dios le tienen preparado a sus siervos o caemos en el engaño de creer que lo que el mundo nos ofrece es mas valuable.
En muchos casos es una triste realidad en donde le damos prioridad siempre a nuestro empleo y le ponemos mas atencion a lo que nuestro jefe nos dice que a la palabra de Dios.
Si hemos conocido del Señor debemos revisar nuestra lista de prioridades y organizarla como debe ser colocando a Dios y su obra en el primer lugar.

En este momento les invito a que lean con detenimiento el salmo 16, "Guárdame, oh Dios, porque en ti he confiado. Oh alma mía, dijiste a Jehová:Tú eres mi Señor;No hay para mí bien fuera de ti. Para los santos que están en la tierra,Y para los íntegros, es toda mi complacencia. Se multiplicarán los dolores de aquellos que sirven diligentes a otro dios.No ofreceré yo sus libaciones de sangre,Ni en mis labios tomaré sus nombres. Jehová es la porción de mi herencia y de mi copa;Tú sustentas mi suerte. Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos,Y es hermosa la heredad que me ha tocado. Bendeciré a Jehová que me aconseja;Aun en las noches me enseña mi conciencia. A Jehová he puesto siempre delante de mí;Porque está a mi diestra, no seré conmovido. Se alegró por tanto mi corazón, y se gozó mi alma;Mi carne también reposará confiadamente; Porque no dejarás mi alma en el Seol,Ni permitirás que tu santo vea corrupción. Me mostrarás la senda de la vida;En tu presencia hay plenitud de gozo;Delicias a tu diestra para siempre.
Salmos 16:1-11"
Este es un hermoso Salmo que nos muestra un poco lo que nos espera aquellos que servimos a Dios, que confiamos en El, que bendecimos su nombre y ponemos a Dios sobre todas las cosas en nuestra vida, lo primero es que somos guardados por Dios en todo momento, en nuestra vida el sera el que sustente todo, cada dia tendremos consejos de parte de Dios, reposaremos tranquilamente, estaremos siempre contentos en todo y El salvara nuestra alma. Pero debemos tener presente que esto ocurre cuando ponemos de primero a Dios y su obara como proposito en nuestra vida, para terminar les dejos el verso once de este capitulo recordando la dicha que tenemos de poder estar siempre al servicio de Dios.
Dios les bendiga