Next step. Trip, trip, trip...
Hi again Steemit!
Es un hecho, llegué, me gustó y me quedé en Steemit, y ahora lo que se viene en este blog...
🔹 Curiosities Monday (CM) 🎁.
🔹 Wednesday poetry (WP) 📖.
🔹 Friday of places (FoP) 🌃.
🔹 Bonus weekend (BW) 😁.
Bitacora #1 CM 🎁 Trip, trip, trip...
Es imposible empezar esta historia sin remontarnos a la historia de Albert Hofmann, químico suizo, primero en sintetizar, ingerir y experimentar los efectos del LSD. (Thanks Albert).
Hofmann descubrió por accidente el LSD, mientras trataba de estabilizar el ácido lisérgico (derivado de la ergotamina usada en una medicina para tratar la migraña). Gracias a una serie de mezclas entre el ácido y diferentes moléculas orgánicas, Hoffman descubrió la dietilamida de ácido lisérgico -25 (LSD), esto por 1938. Compuesto que en la actualidad suele usarse con fines recreativos y es conocido como ácido o trip.
Pasados cinco años de este gran descubrimiento, Hoffman (por accidente) se expuso a este compuesto, mencionó sentir mareos y ver imágenes fantásticas. Días después, exactamente el 19 de abril (celebración del Día de la bicicleta) de 1943 decidió probar los efectos de este compuesto de manera intencional.
Hoffman tomó una dosis de LSD, salió de su laboratorio y debido a restricciones de automóviles por la segunda guerra mundial, optó por movilizarse en bicicleta, gracias a este maravilloso y caleidoscópico viaje conmemoramos el día de la bicicleta.
Luego de esta pequeña reseña, les contaré mi experiencia con el LSD...
Fue una de las experiencias más eufóricas que he pasado, me encontraba en La Candelaria, un hermoso y empedrado barrio de Bogotá (capital de Colombia y lugar en el que resido). Acompañada de tres amigos me propuse a emprender el viaje mientras apoyaba una marcha por los derechos de los maestros en mi país.
Algo del epicentro de la marcha y el trip. (Plaza de Bolivar)
Esta droga alucinógena viene en forma de carton y suele ser consumida de dos maneras, colocandola bajo la lengua y dentro del ojo (hay quienes dicen que de esta segunda manera es posible lograr más alucinaciones). Al ser la primera vez que la consumía lo hice vía oral, luego de 40 minutos "me cogió"(hizo efecto).
Durante al rededor de 2 horas me sentí en el viaje más sonriente y fluido de mis días. Gritaba a todo pulmón al escuchar a maestros de diferentes ciudades reclamando por lo que les pertenece. Luego de la euforia llegaron unas ganas incontrolables por caminar, decidí recorrer La Candelaria en búsqueda de los duendes que allí se encuentran (historia que luego les contaré).
Luego empecé a sentir el "bajón" (caída del efecto), extrañamente no sentía melancolía o sensaciones relacionadas con esta, sentía un viento apacible, la calma que había en mi no lograba ser alterada por nada.
No tuve como otros grandes alucinaciones, ni vi el mundo de muchos colores, pero sin duda alguna, viajé al son del LSD.
Esperando tus próximos artículos, con o sin dietilamida.
Estarán cargados de muchísimos compuestos. Gracias por leerme. 😊
No he probado el LSD pero ame las fotografías, tal vez, algún día :)
Es en definitiva una realidad preciosa. Gracias por leer, me alegra que te hayan gustado las fotos, cada una fue pensada. ;)