MEMORIAS DE TI

Llevo conmigo todos esos momentos que gozamos, instantes irreemplazables. Tú y yo solos, viviendo los días como si se trataran de los últimos. De tu risa mi memoria nunca se liberó y de tus labios para mí etéreos, mi retentiva nunca supo asimilar como dejarlos ir. Más aún recuerdo, tu piel canela claro y su indescriptible adicto olor que más impregnado no pudo dejarme, como si se tratase de una fragancia privilegiada de firma.

Recuerdo su suave y delicada tez, recuerdo cada uno de sus lunares plasmados en su dermis, no olvido su asombrosa silueta que entre mis manos encajaba perfectamente ¿Cómo puedo omitir los espacios que compartimos?, ¿Cómo puedo negar las noches en las que nos unimos sin que nos importara el mundo? Quisiera devolver el tiempo para pasar un minuto más contigo.

Anhelo volver a ser el catador de tu vino íntimo, deseo volver a aspirar tu aroma, quisiera yacer en tu figura y percibir tus caricias. Ansío volver a infiltrarme en tu interior y sentir esa explosión que nos llevaba a reproducir el sonido peculiar que se hace después de tomar un sorbo de Coca-Cola helada, ese asombroso e irreemplazable momento de éxtasis y pasión.

Donde estés ahora o con quien estés ahora yo sé que no te sientes igual a como tú y yo nos sentíamos, recuerdo cuando me susurrabas al oído las veces que te hacia elevar fuera de la tierra, además de los tantos centímetros explorados tanto de tu casa como de tu cuerpo cuando estábamos en nuestros momentos de intensas y acaloradas batallas de torsos desnudos hambrientos.

Yo sé que todo esto que ansió ya es imposible y que no podré regresar a esos magníficos instantes que viví sin saber que me encontraba en el edén. También sé que volver a encontrarnos causará terremotos en cada célula de nuestros cuerpos, pero será inevitable no darnos cuenta, cuando soy más que veterano en tu cuerpo y tú en el mío.