La nueva y la vieja escuela, drones y perros trabajando juntos en escuadrones de búsqueda y rescate

   El uso de drones en misiones de búsqueda y rescate es una realidad tangible, con inestimables ventajas en cuestiones de acceso, visibilidad y rapidez, que  combinado con la destreza de los perros en operaciones de emergencia para encontrar a personas desaparecidas, crean una fuerza conjunta superior, aumentando las posibilidades de éxito de cada operación. 

   La visión desde el aire de los drones, permite localizar objetivos, indicar la mejor vía de acceso y el traslado de insumos médicos (sueros antiofídicos, antídotos, vendajes, sueros, entre otros.) al sitio, incluso hasta en circunstancias donde a cualquier otro medio le sería imposible entrar. Por otro lado, en misiones de búsqueda de personas desaparecidas (excursionistas, deportista extremos, ancianos con  deterioro cognitivo, niños, personas con trastornos psiquiátricos), la utilización de perros es muy común, sobre todo en países nórdicos. Los perros con su sobre desarrollado sentido del olfato (250 millones de receptores olfativos), aumentan la posibilidad de encontrar a los desaparecidos. 

   Al utilizar drones, se aumenta la seguridad de los equipos caninos, acorta el tiempo de seguimiento y búsqueda, son más efectivos los operativos y la informacion sobre los medios necesarios para el rescate fluye de manera optima. Existen zonas de difícil acceso al rescatista humano, otras son difíciles incluso para los perros, y el dron determina esos sitios, ampliando el rango de rastreo e identificando las aéreas a las que si pueden llegar los perros y no los rescatistas humanos. Por otra parte, el uso de drones reduce abismalmente el costo de la puesta en escena de helicópteros, concentrado costo en adiestramiento (humano y canino), insumos y equipamiento.