El profe me tiene manía.

Me recuerda el mundo crypto a esta famosa frase que todos hemos pronunciado alguna vez. No hay ni pizca de auto crítica tras el debacle del mercado. Las ballenas, la manipulación, los gobiernos, los bancos. Pero la verdad es que el mundo crypto está pagando su falta de avance en la aceptación de la criptomeda por el usuario final. ¿No esperaréis que vuestros rivales os pongan la alfombra roja?...desde mi humilde posición de usuario final no experto voy a exponer algunos puntos que no acabo de entender.
Me da la sensación de que a la comunidad crypto le ha ido bien siendo un guetto mientras las monedas subían como la espuma, no son visibles esfuerzos de llevar el mundo crypto a toda la sociedad, parece que la comunidad ha estado más preocupada en posicionarse ante el despliegue que trabajando para que ese despliegue sea definitivo y llegue al usuario final. Voy a exponer algunos detalles que me han llamado mucho la atención.

El software:

Señores el software en general del mundo crypto es lamentable. Seguramente la parte interna sea genial y gracias a ello funcionan las criptomonedas, pero al usuario final nos importa una mierda la vida del friki informático. Queremos cosas sencillas, visualmente agradables y funcionales. No voy a entrar a analizar una a una las soluciones, pero en general el nivel es patético, hasta el punto que hay monedas con millones en capitalización que te dan directamente el código fuente para que te busques la vida.

El minado:

Siguiendo con el hilo anterior, el minado tiene software también lamentable, el hardware no es accesible, los nodos no tienen beneficios. Los pools se han convertido en un looby. Se debería asegurar la descentralización de la red penalizando al hardware específico poco accesible, limitar la ganancia por ip u otras medidas que consigan hacer que un usuario con pocos recursos pueda participar de la red, esté en igualdad de condiciones en la medida de lo posible y le sea rentable. Si la descentralización de la economía no va a servir para que haya una mejor distribución de la riqueza os la podéis meter por el ojete, hablando claro.

La organización:

El mundo crypto es un nuevo gremio y como tal debe estar unido y actuar de forma conjunta en la defensa de su modelo de negocio. Sobran monedas y faltan buenos proyectos. La comunidad debe valorar los proyectos por lo que aportan, no por lo que prometen.
Es imprescindible organización y auto regulación, tanto de las ico, como de los tokens, es necesario que exista organismos independientes que certifiquen la calidad de las criptomonedas, marcar standars y controles que den garantías al usuario final.

Los servicios:

Faltan aplicaciones del blockchain que resuelvan necesidades reales de la población, la gente no quiere saber que es la cadena de bloques, ni le importa un pepino lo que es el dinero, la gente quiere soluciones nuevas para los problemas de siempre. Faltan proyectos que moneticen el mercado. Estamos viendo como las empresas se financian por medio de tokens con millones de dólares solo por sacar betas precarias de software. Cuando apoyamos proyectos que son solo humo, estamos alimentando una burbuja que afecta a todo el sector, por lo que en momentos de crisis vemos una vergonzosa y exagerada correlación positiva entre todas las monedas, puedes operar cualquier moneda contra el dólar, solo mirando el gráfico de Bitcoin, porque todas se mueven al unísono. La mayoría de criptomonedas no tienen valor por si mismas, viven de la ignorancia del criptoinversor medio.

En definitiva, me da la sensación que la comunidad ha estado más preocupada en llenarse los bolsillos que en llevar de verdad la tecnología al usuario de a pie y lo puede pagar caro. Llegarán empresas, como Apple u google, cogerán el trabajo hecho, le pondrán un bonito envoltorio y se les comerá la tostada. Como el pescador que no pesca peces pequeños o el cazador que no caza en época de cría, la comunidad debe cuidar el ecosistema que le da de comer, la avaricia rompe el saco, los beneficios y la verdadera revolución llegarán cuando entre la mayoría social, esta debe ser la prioridad de todo el mercado, acercarse al usuario final y todos los pasos que se den de forma conjunta han de ir en esa dirección. Es evidente que las criptomonedas son el futuro, lo que no está claro es cuales de las que hoy existen estarán también en ese futuro.