¿Como hallar la Musa inspiradora para escribir, pintar, componer una canción o un poema?

El problema que todo escritor, pintor o compositor enfrenta al momento de escribir o pintar es la falta de inspiración. No sé de alguno que haya dicho que tiene inspiración en todo momento. Hasta los más reconocidos y renombrados enfrentan esta dificultad, unos más que otros pero igual les pasa. La Musa no está presente en todo momento, pero eso no significa que no se pueda buscar inspiración. Hay muchas maneras de inspirarse para una buena escritura, un poema, una canción o una buena novela. Podemos hallarla escuchando música, viendo un bonito paisaje, sentarnos en nuestro sitio preferido o tomando una taza de café. En este post quiero darles unas buenas recomendaciones para encontrar la musa que nos inspire al momento de escribir.

Quizás la idea no te convence y eres demasiado exigente contigo mismo. No seas tan perfeccionista y trabaja con lo que tienes. En la mayoría de los casos, era mejor idea de lo que pensabas. Además, las mejores ideas nacen cuando se están desarrollando otras ideas, así que no temas dar rienda suelta a tu imaginación y dejarte llevar. Es un largo camino, y ya llegarás al destino que tenías pensado. Pero desechar otras ideas y aprender de ellas también te ayuda a llegar a esa meta, solo debes comenzar.

No las desperdicies. Si estás en la cama, a punto de dormirte, y se te ocurren dos líneas perfectas para tu capítulo, no creas que a la mañana siguiente te acordarás facilmente, casi siempre sucede que se olvidan. Ten a la mano siempre un cuaderno, o usa las nuevas tecnologías y escribe una nota en tu smartphone. Cuando por la mañana empieces a escribir, esas dos líneas que parecían tener poca importancia, te ayudarán mucho a empezar con buen pie. La Tranquilidad y el confort de la cama son un buen relajante y hace que nos lleguen ideas extraordinarias pero hay que tomar apuntes.

Todos tenemos uno. Puede ser en un cuaderno viejo y destartalado al que tienes mucho cariño donde guardas tus notas personales, acostado en la cama, o puede ser en la comodidad de tu escritorio con el teclado del ordenador como fiel compañero. Depende de ti. Busca ese lugar en que te sientas más a gusto. Yo por ejemplo, me siento en el escritorio que tengo en mi casa, escucho música suave con poco volumen y eso me da inspiración.

Todo escritor, antes que nada, es observador. Las ideas no vienen de la nada: Se necesitan experiencias previas que le den forma. Fíjate en las personas de tu alrededor, vecinos, compañeros de trabajo, en sus vidas cotidianas, en lo que hacen: hay miles de historias esperando descubrirse. Mira las noticias, lee mucho. Cuanto más sepas, cuanta más cultura general tengas, más fácil te resultará conectar los puntos y lograr una buena inspiración. Si no te inspiran escribe sobre tu vida, escribe tus memorias, ese sería un tema muy interesante que a cualquiera le encantaría leer. Jeanne Walls era una desconocida cuando escribió su memoria "El castillo de cristal", vendió más de 2 millones de ejemplares, se tradujo a 23 idiomas y se convirtió en película.

Un método al que algunos escritores acuden es a pensar en dos objetos distintos y que no tengan relación el uno con el otro. Luego buscan la manera de conectarlos. Por ejemplo: una foto de Paris y un avión, el tema podría ser: “El gran amor que nació en un vuelo a Paris” Quizás suena un poco cursi pero es una idea a la cual puedes desarrollar y, aplicando el primer punto, quizás no es la mejor idea que puedas tener, pero te servirá para no enfriar a las musas. Así, trabajando en esa idea quizás llegues a otra mejor.