La última lección - Reto de dos palabras para Hispano hablantes
Lágrimas comenzaron a caer por mi mejilla, cuando imágenes en mi cabeza me inundaron de una terrible nostalgia. Vi a mi madre desplomarse en el suelo cuando apenas abrió la puerta de la casa, y con una velocidad impresionante mi padre me llevó al sótano, y aunque entre jadeos hice muchas preguntas, él se limitó a no responder y a solo a darme una orden: permanece ahí, aunque tu vida consista en estar en este lugar. Dios... de verdad quise hacerle caso, pero cuando el hambre y la sed no me dejaron pensar decidí salir. Mi hogar estaba muy desordenado y el polvo del lugar era inminente. El cuerpo de mi madre había sido retirado, pero el manchón de la sangre estaba seca sobre el suelo. Tomé de la nevera los restos de comida que habían quedado, y así fría como estaba, decidí comerla. Con mucho miedo me acerqué a la ventana y pude ver como en la calle habían montañas de cuerpos, uno sobre otros, inertes. Y como si fuera la realidad más cruda, observé sobre los restos de los que fueron amigos y vecinos el rostro de mi padre y en su frente un enorme agujero del que salían moscas...
No sé a ciencia cierta cuál era el odio que existía hacia nosotros, pero era la historia de mi raza la que me azotaba con crudeza. Parecía que habíamos venido para ser sometidos y esclavizados por numerosos imperios, desde Egipto hace miles de años hasta ahora por los alemanes... Dios... parecía increíble que tuviésemos que pasar por todo esto. No obstante, las palabras de mi madre fueron resonantes en mi mente: Nuestro olvido por Dios siempre nos llevará a vivir en dependencia o esclavitud, Tobías. No se necesita de armas y poder para llevar cautivo a una persona, a veces, podemos vivir en prisión por culpa de nuestros propios errores que no llevan a la culpa y nos impiden avanzar... Sonreí ante el recuerdo de sus palabras, sólo faltaba la taza de chocolate caliente para seguirme sermoneando. En verdad como la extraño.
Un temblor me hizo recordar el lugar en el que me encontraba, y fue el segundo temblor el que me hizo temer a gran manera. Entonces, lo vi. A unos metros del barco se encontraba a lo que se le conoce como un submarino, de esos que eran la cúspide de numerosos ataques alemanes y de los que había traído gran cantidad de victorias o batallas oceánicas. Quise ver qué tipo de submarino era, algo que había aprendido hace unas horas no sólo por las conversaciones de mis compañeros marinos, sino de las imágenes que colgaban sobre los muros con el fin de mantenernos a todos alertas si llegáramos a contemplar uno. Pero, ¿cómo podíamos verlo en la oscuridad de la noche en pleno eclipse lunar? De hecho, me parecía impresionante que apenas pudiera ver las sombras relucientes de aquel metal al contacto de los finos rayos de luz que proporcionaba el faro del barco. Este era uno que usualmente transportaba mercancía pequeña, y aunque no representaba peligro para los alemanes como los barcos de guerra o tan importantes como los de transporte petrolero, era seguro que les interesaba tomar parte de lo que se transportaba... lo que no sabían es que la mercancía se trataba de emigrantes judíos que aspiraban un poco de paz y libertad.
Estaba espantado de lo que estaba sucediendo, y el grito de muchas personas me confirmó mis sospechas. Era obvio que nuestro destino había sido otro. Que tonto fui cuando creí que el dinero podría solucionar mi vida, y esta vez fueron las palabras de papá las que llegaron: Confiar que el dinero es la solución de nuestros problemas nos hace tan insensatos, por el simple hecho de que aún no hemos aprendido. Y así era... no había aprendido hasta ahora. Sonreí. Otro ídolo cayó en mi vida. Miré el cielo estrellado que parecía tan inocente en la noche, pero... era espectador de lo que estaba sucediendo y parecía que degustaba de aquello. Me acerqué a la punta de la proa, y estando ahí, con un miedo garrafal, me impulsé a lanzarme al mar recordando que habría justicia, no sería ahora pero la habría, y cuando eso suceda, no me importaría porque he muerto confiado en que Yahveh accionará por la promesa dada a su pueblo. Y aun sin golpear contra el mar, la última lección llegó: La clave para una vida plena, era la Fe. Mi madre siempre tuvo razón...
Así mismo quiero aprovechar de agradecer a la nueva comunidad #Steemhispano por el apoyo y la solidaridad mostrada.
Excelente uso de los recursos históricos y las verdades bíblicas de la promesa de Dios a Su pueblo: la niña de sus ojos. Upvote.
"Nuestro olvido por Dios siempre nos llevará a vivir en dependencia o esclavitud, Tobías."
Gracias hermano, que bueno que te haya gustado...
what is this called lunar eclipse
I'm sorry, I'm not sure about your question, but if you're referring to the title of the story it would be: the last lesson
in english: lunar eclipse
Hey! pero vaya sorpresa, mi estimado @rubencaterpila. Te sigo y tienes mi voto .-) nos seguimos viendo!
gracias, claro que sí...
Nice shoots! Glory to the creator
Oh... thanks
Excelente jeje cumpliste el reto.. muy bien pensado, buen relato!
Gracias Zunitaa
Vaya buenas palabras brou
Oye gracias
Hermanito, por acá mi voto.
Gracias hermano... un abrazoo