2018 Año De Las Mujeres Organizadas
Todos lo dicen: 2018 es un año fundamentalmente clave en la movilización de las mujeres. Este 8 de Marzo, Nosotras Paramos, pero no se trata de un solo día 👉 ¡En 2018 todos los días serán Día de las Mujeres! ¡2018 será 2018M!
El año 2017 será recordado por la fuerza desbordante del movimiento feminista a escala global. Nos reivindicamos vivas, libres y deseantes; nos afirmamos más juntas y diversas que nunca. Este año, las mujeres nos alzaremos de nuevo contra todas las formas de violencia y explotación que dominan nuestras vidas: nuestras democracias, nuestras economías, nuestros territorios y nuestros cuerpos.
Por eso, el paro internacional de mujeres del próximo 8 de marzo comienza hoy, ¡en este instante!
PrePárate contra la cultura y la educación machistas; contra el neoliberalismo que produce cuerpos y vidas desechables; contra la división sexual y racista del trabajo; contra el puritanismo; contra la regulación de nuestros afectos; contra la represión de nuestras luchas. PrePárate para cuidarte y cuidarnos; para ocupar las calles y las camas; para desearnos, para encontrarnos, para volver a mirarnos.
PRE-PARA-TE
¡Feliz 2018M, Hermanas! ¡Este será sin duda el año de las mujeres! Disfruta esta noche y PrePárate para lo que está llegando: una marea feminista que va a inundarlo TODO de lucha, dignidad y deseo, ¡mucho deseo! 💜🌊
¿De qué va la campaña?
Esta campaña es solo previa para las movilizaciones conjuntas que se realizarán más adelante de manera internacional, y quiere visibilizar la coordinación global del movimiento feminista y difundirla para continuar sumando colectivos y personas.
La idea es que los HT #PREPARATE y #2018M se sigan usando hasta el 8M, combinados con los que se empleen en cada organización o país o vaya demandando cada coyuntura, hasta dar paso al contenido de la movilización propiamente dicha del 8 de marzo y sus hashtags propios.
Manifiesto
La marea no se detiene Nosotras Paramos
Las mujeres del mundo nos encontramos en un proceso de revolución existencial. El 8 de marzo de 2017 nos unimos para tomar una medida de fuerza: hicimos el primer paro internacional de mujeres, en una articulación transnacional, multilingüe, interseccional y heterogénea de la que participaron 55 países. Empezamos a tejer un nuevo internacionalismo.
Nos constituimos como sujetas revolucionarias inesperadas a nivel global e interpelamos a todas las formas de explotación, racismo y crueldad desde una ética feminista que tiene como centro una política de la vida y no del sacrificio. Para nosotras todos los cuerpos y todas las existencias cuentan. Ponemos en práctica aquí y ahora el mundo en que queremos vivir.
Decimos Ni una menos como una contraseña de transversalidad que conjuga la música de anteriores revoluciones y la tenacidad de las luchas feministas. Pusimos a circular una forma de poder que se disemina como un virus y brota en el centro de las organizaciones políticas y sociales abriendo espacios de democratización y rompiendo discursos de la impotencia; quiebra lo doméstico como confinamiento; altera las discusiones sindicales; activa las resistencias en el ámbito de la producción y las economías populares; radicaliza las luchas contra el extractivismo y los despojos; irrumpe en las industrias del espectáculo; permea los lenguajes artísticos; pone en tensión las lenguas sedimentadas para obligarlas a nombrar existencias e identidades nuevas, y discute el control de las finanzas sobre nuestros cotidianos. Explota en las plazas y en las camas. Nada es ajeno a la revolución feminista, la marea avanza y se repliega, encuentra cauces debajo de la tierra y emerge como un temblor que suma nueva fuerza.
Nosotras paramos porque nos empuja la marea y porque nuestras rebeliones nutren la marea.
Nosotras paramos y paramos el mundo para desnaturalizar las violencias y todas las formas de explotación. Paramos contra la crueldad que toma nuestros cuerpos como botín de conquista. Paramos contra el racismo y las apropiaciones de nuestros cuerpos y nuestros territorios. Paramos en defensa de nuestras vidas y nuestras autonomías. Paramos para inventar un tiempo propio en el que nuestro deseo diseñe otra forma de vivir en la tierra.
Nuestro paro no es solo un acontecimiento, es un proceso de transformación social y de acumulación histórica de fuerzas insumisas que no permite ser encorsetada en las reglas de la democracia formal. Nuestro movimiento desborda lo que existe, atraviesa fronteras, lenguas, identidades y escalas para construir nuevas geografías que no son las del capital y sus movimientos financieros.
Contra la división sexual y racista del trabajo; contra el gobierno de las finanzas sobre las vidas; contra la producción de cuerpos y vidas desechables; contra el puritanismo con el que pretenden neutralizar nuestras experimentaciones; contra las apropiaciones neoliberales de nuestras reivindicaciones; contra el marketing violeta de las transnacionales; contra los imaginarios y prácticas machistas en los medios de comunicación; contra el punitivismo (la política del castigo por el castigo mismo) que pretende disciplinar y moralizar en nuestro nombre; contra la represión, la criminalización y la demonización de nuestras luchas: nosotras paramos.
La huelga es una herramienta que reinventamos para desarmar la trama de las violencias contra nosotras. El paro nos permite hacer un mapeo de las nuevas formas coloniales e imperiales que se ejercen contra nuestras economías y nuestros territorios. El paro nos convoca a investigar y activar las resistencias y desobediencias, la producción de formas de vida alternativas y de cuerpos rebeldes.
Nos convocamos todas nosotras, mujeres, lesbianas, trans, y cuerpos feminizados del mundo a propagar el virus de la insumisión. Nos convocamos en una medida de fuerza y un grito común para el próximo 8 de marzo de 2018: nosotras paramos.
¡Ni Una Menos, Vivas Nos Queremos!
Excelente compañeras Faccioneras ;)
La mujeres tienen exactamente los mismos derechos que los hombres, y aun hay lugares donde eso no es bien aceptado. apoyo esta campaña. Éxitos.