El pequeño monje Yincha nos enseña a soltar para permitir crecer

El síndrome del nido vacío es un problema que se presenta en el ciclo de vida de algunas Madres y Padres cuando sus hijxs se independizan. Este síndrome se caracterizas por la presencia de signos y síntomas similares a los trastornos de depresión y ansiedad.

Asimismo, Ríos (2016) menciona que el nido vació es una etapa normal que presenta el ciclo vital de la familia, resaltando incluso que toda familia nace de un nido vació, puesto que cada miembro de la pareja viene de un núcleo familiar diferente, del cual se tuvieron que independizar para formar una nueva familia.

Con lo anterior mencionada podemos observar que, el nido vacío es un proceso de crisis natural por la que pasan todas las familias, y como en toda crisis, es una oportunidad para crear nuevas maneras de relación con las personas que nos rodean, generando a larga plazo un crecimiento individual, familiar y social.

Sin embargo, cuando la Madre o el Padre, o ambos, no logran afrontar de manera adecuada esta nueva etapa en su vida, puede generar en ellos un estancamiento personal y, suelen sentirse desadaptados al entorno donde se desenvuelve. Todo esto ocasiona que, una etapa natural de la vida de una familia pase a transformarse a un síndrome que requiere de una especial atención.

Signos y Síntomas del Síndrome del Nido Vació.

Antes de comenzar a explicar cuáles son los signos y síntomas característicos de este síndrome es importante aclarar que, Ríos y Ordoñez mencionan que el síndrome del nido vacío no se encuentra enmarcado en los manuales diagnósticos DSM-5 y el CIE-10. Por ello, los síntomas que se van a describir aquí no son universales, sino que para su diagnostico dependerá de otros aspectos tales como el tipo de relación que mantenía su hijx, el estado de salud, la posición socioeconómica, nivel de independencia, entre otros factores.

Sentimientos de Tristeza: La personal pasa gran parte de su día con tristeza y abatimiento, presentando también labilidad emocional cuando transita por los lugares donde el hijo o la hija solía frecuentar, llegando a pensar que no podrán ser tan felices como antes. Estas personas se suelen aburrirse con facilidad, producto de que no consigue recrearse en ninguna actividad. Asimismo, la Madre o el Padre pueden llegar a presentar dificultades y problemas en varias facetas de su vida debido a un sentimiento general de tristeza.

Sensación de Soledad: Desarrollo de un patrón de creencias y pensamientos que, le sugieren a la persona que el hecho de que el hijo o la hija se hayan independizado significa que no volverán a verlos, o que no se van a recordar más de su existencia, quedando por ello destinados al olvido. Esta sensación de soledad suele venir acompañado de angustia y llanto, que puede empeorar el estado emocional de la persona que lo padece.

Melancolía: es habitual que la persona se la pase parte de su tiempo recordando los momentos con que compartía con su hijo o hija, pero se vuelve patológico cuando por dedicar tanto tiempo a sus recuerdo descuida su salud, oficio o las relaciones que mantiene con las personas que están a su alrededor.

Pérdida del Sentido de Vida: Cada nueva etapa conlleva a una crisis que exige que nosotros reconstruyamos continuamente nuestro sentido de vida, con el fin de que este acorde con la realidad que estamos viviendo en la actualidad. Cuando una persona coloca como centro de su vida a su hijo o hija, llegan a creer ser solamente Padre o Madre, por ello cuando llegan a la etapa del nido vacío siente que ya no son nada, y que su vida útil termino con ello.

Quejas Somáticas: Cuando los hijos se independizan suele pasar que, el Padre o la Madre, o incluso ambos, llegan a presentar problemas de salud donde se exacerban los achaques habituales productos de la edad, empiezan a padecer de enfermedades de manera recurrentes, presencia de insomnio e incluso, puede suceder frecuentes accidente que ponen en riesgo la salud del progenitor. Todo esto suele ser una forma en cómo el Padre o la Madre, de manera consciente o no, consigue llamar la atención con el fin de mantener la relación con sus seres queridos.

Conflicto con la Pareja: Le suele pasar a las parejas que se mantienen juntas que, cuando llega la etapa del nido vació empiezan a exacerbarse los problemas en la relación de pareja. Esto es porque, las personas estuvieron tan enfocadas a su rol de Padre o Madre, que cometieron el error de no seguir cultivando su relación. Por lo tanto, la relación se descuido durante los años en que los hijos dependieron de los padres. Los temas de conversación, las actividades que hacían en conjunto y que los mantenía unidos solían tener como base a sus hijos, y ahora que ellos ya no están se encuentra conviviendo con una persona que ya no saben si aman. Por ello, esta crisis del nido vació si no se afronta de manera adecuada puede llevar a una ruptura de la relación.

¿Cómo empezar a sanar el vació del nido?

Antes de empezar a especificar cuáles son los puntos resaltantes que hay que tomar en cuenta para prevenir el síndrome del nido vació, quiero darles la recomendación que hace la Psicóloga Lucy Romero. Esta psicóloga resalta la importancia de los rituales, especialmente como estrategia para cerrar ciclos y procesos psicológicos.

Ella invita a que, cuando llegue el momento de la independencia de los hijos, el Padre y la madre se tomen un tiempo para preparar y realizar un ritual personalizado, que signifique para ellos el cierre y agradecimiento de una etapa en la cual pudieron compartir con sus hijos. Para hacer este ritual, es válido que usen como apoyo alguna religión de su preferencia, lo importante es no limitarse a solo ello. Puesto que, ese ritual es un espacio donde puedan permitirse hacer y/o decir aquello que quizás no tuvieron la oportunidad de hacer en su momento.

Este ritual puede estar conformado por una misa de agradecimiento por los años vividos, como también puede ser de peticiones para futuras bendiciones. Luego de esto pueden realizar un encuentro familiar, donde se permitan compartir con sus hijos lo que sienten en ese momento, para lo cual es factible hacerlo a través de una comida o algún viaje familiar.

Finalmente, es importante tener en claro cuál es el cierre del ritual, sin tener que en el proceso atropellarse por ello, sino verlo como una actividad que les permitirá terminar de soltar, que pudiera ser algún viaje donde se dediquen tiempo para sí mismo, he incluso cultivar la relación de pareja.

¿Cómo Prevenir el Síndrome del nido vació?

La prevención del nido vació puede comenzar desde el momento en que se tiene el primer hijo, o en cualquier momento de la vida familiar. En lo que he leído hasta ahora, encontré que hay tres puntos importantes a resaltar para la prevención de este síndrome, los cuales son:

Cultivar una vida personal Independiente: en este punto quiero hablar de la importancia de buscar desarrollar una vida independiente, donde se le dé un espacio a las cosas que nos interesa hacer, como pudiera ser algún hobby, aprender sobre un tema nuevo, compartir con personas fuera del núcleo familiar, viajar, entre otras actividades recreativas. En pocas palabras, permitirse un espacio para invertir tiempo y esfuerzo para ser egoístas. Esto les ayudara a las personas a tener una identidad propia y no codepender de los demás para saber quién es.

Generar una economía personal: acá quiero hablarles sobre la importancia de ser capaces de generar y tener dinero propio. Muchas veces pasa, y especialmente en las mujeres que, suelen depender económicamente de la pareja, y esto nos limita la libertad, porque hace que solo nos desempeñemos en pocos roles, ocasionando que sintamos tener una vida monótona. Es parte de la calidad de vida tener la libertad para permitirse darse un gusto material cuando se quiere, y no depender de nadie para hacerlo. Tener los propios ingresos ayuda a que las personas sean más independientes y seguras.

Reencuentro con la pareja: Es muy importante que las parejas eviten centrar sus vidas solamente en los roles de Padre y Madre. Para ello se les invita a que trabajen en equipo, y vayan cultivando desde un principio espacios privados solo para ellos. De que será un reto poder conseguir espacios disponibles para ambos, y más aun mantenerlos, es un hecho indudable, pero más duro será llegar a la vejez y conseguirse que, se ha compartido la mayor parte de la vida con un desconocido.

El nido vació es una crisis por la que pasan tarde o temprano todas las familias, y no por ello se tiene que convertir en algo que genere sufrimiento, puesto que si lo sabemos afrontar se transforma para la pareja en una oportunidad de crecimiento, porque al irse los hijos van a tener más tiempo y dinero como para por fin realizar esos planes que habían quedados desplazados a un segundo plano.

¿Qué podemos aprender del video?

Podemos ver en el video que, Yichan al cuidar por un tiempo a ese pajarito se llega a sentir como muchos padres y madres, que al crecer sus hijos luchan al encontrarse con el momento de su independencia, sin saber que le pudieran estar haciendo más daño a sus hijos al limitarlos que se queden. En Yichan también vemos que, es inevitable sentir tristeza por la partida de un ser querido, siendo necesario por ello sentirla y expresarla. Lo importante es que no convirtamos una etapa natural de la vida en una causa de sufrimiento, porque si no nos estancaremos en ella.

Si quieres ver otro vídeo del pequeño monje Yichan, aquí te dejo el enlace de mi anterior post en el que hablo sobre la crisis:
Crisis