Crónicas de un venezolano migrante.
A quien de ustedes no le ha tocado despedirse de sus familiares, vecinos y amigos que salen de nuestro país en busca de mejores oportunidades, y que se van prometiendo volver un día.
Hay muchas historias de este tipo, así como la de aquel muchacho honesto y trabajador que se fue para EE.UU, buscando oportunidades y un mejor futuro para él y su familia. Trabajo duro, siempre puntual y muy seguro de sí mismo, siempre diciendo que un día volvería a su Venezuela querida. Estuvo siempre pendiente de su familia, les hacía llegar su remesas cada dos semanas, siempre puntual, nunca hubo atrasos ni demoras, como le había ido muy bien se propuso y logro construir una casa enorme para su familia y para cuando él regresara.
Pasaron veinticinco años y aquel muchacho, ya no era tan muchacho. Se había casado y tenido tres hijos, logró hacer una pequeña fortuna en $, gracias a su esfuerzo y dedicación y que convertida en Bolívares (moneda venezolana) era una gran cantidad y hasta bonita le parecía. Tomó entonces la decisión de regresar a su país, aquel que tanto añoraba y que ni los años pudieron hacer que olvidara su promesa de volver.
Su familia, estadounidenses de nacimiento no quisieron acompañarlo. Ya que ellos no extrañaban a esa Venezuela que nunca fue su país de nacimiento, sentían algún tipo de atracción por ese país, pero solo porque en las vacaciones les parecía nice pero nunca pensaron en quedarse a vivir en el.
Decidido, volvió solo a su país. Regreso a su pueblo donde había nacido, crecido y vivido los momentos más hermosos de su vida en su recuerdo, regreso con los mismos sentimientos con los que se había ido, lágrimas en sus ojos y ese nudo en la garganta cuando vio a su mamá y su papá, avanzados de edad pero con ese aroma que él tanto extrañaba, lloro de felicidad al ver de nuevo a sus hermanos, mayores y con peso de más, sus sobrinos, algunos que solo conocía por fotos. Sintió que en su corazón había entrado lo que tanto le faltaba. Volvió a sentirse feliz.
Al paso de los días, se dio cuenta que la Venezuela a la que tanto añoraba, de la que tanto hablaba y ponía por todo lo alto con los estadounidenses y amigos del norte, no era la misma que el había dejado años atrás, no era esa Venezuela de ahora, algo tan inexplicable que ni él mismo podía expresarlo, y que lo llenaba de sentimiento.
Entendió que a pesar de su emoción de estar de vuelta, le daba dolor saber que él ya no pertenecía a Venezuela, que debía regresar a EE.UU, donde había formado una familia, un hogar con sus hijos, nuevos amigos y vecinos que lo ayudaron cuando más necesito del calor de un abrazo, donde había trabajado duro por tantos años para darle lo mejor a su familia. Se dio cuenta que ya no pertenecía a su Venezuela.
Saludos amigos, y un abrazo a todos los hermanos venezolanos fuera de su país. Fuerza y que Dios los acompañe.
Muy triste y cierta la historia :c es muy triste todo lo que esta pasando actualmente en Venezuela, y todos aquellos que quisieran regresar no pueden hacerlo. Y aquellos que se atreven vuelven a irse por que ya no es lo mismo. Saludos.
No es para nada fácil. Cada dia nos toca despedir a un familia o amigo muy cercano... y cada dia esperamos por su regreso. Gracias por visitarme @mariajmr un abrazo.
Entre 2 aguas... muy emotivo el relato...
Muy emotivo y nada alejado de la realidad de hoy en día.
Ciertamente emigrar es un tema bastante triste, y más cuando debe hacerse bajo las condiciones pais de las que ya todos estamos al tanto... Pero bueno, en la vida a veces hay que hacer ese tipo de sacrificios para contar con un nivel de calidad de vida mínimo del que toda persona, por su simple condición de ser humano, es merecedora.
Buen post, amigo. Muchos saludos @radac
Sacrificios grandes y que dejan huellas imborrables en el alma. El pensaba que iba a encontrar todo como lo dejo, pero el tiempo no perdona, todo cambia. Gracias por tu apoyo. Un abrazo. Saludos.
Uff me hiciste llorar, es díficil la elección cuando tu corazón es compartido. Pero tomó la decisión correcta a mi parecer, era entre elegir pasado o futuro. Abrazos radac
Tomó la decisión correcta a pesar de que le dolía en su corazón. El tiempo no pasa en vano y algunos creamos vínculos lejos del hogar que después nos pegan también.
Hola, creo que es primera vez que te leo, y que agradable lectura, y que sentimiento genera. Ya somos muchos que nuestra familia anda regada por el mundo y que difícil es , pienso que somos el tipo de personas con altos valores familiares. Gracias..!!
Gracias por leerme, me alegra mucho que te haya gustado y que llegara el mensaje que quería plasmar, ese sentimiento que a muchos nos embarga. Somos muy apegados a la familia, y eso es lo que nos diferencia de muchos otros países. Saludos
Me pusiste sentimental con este post @radac tengo familia que se ha ido del país y cada uno se va con la promesa de volver pronto, y así van pasando los años, manteniendo la esperanza de tenerlos de vuelta con nosotros, pero me pones a pensar con tu post, sera que cuando regresen van a querer quedarse o solo vendrán de visita. Gracias por compartir tan emotivo relato, bastante reflexivo y lleno de muchas verdades. un abrazo.
Esa era la idea, transmitir ese sentimiento, hacernos reflexionar sobre la situación y sobre lo importante que es la familia. El se fue, ayudo mucho a su familia y acomodo todo para cuando él volviera, pero en su regreso se fue victima del paso del tiempo. Ya nada era igual.
esto es triste, pero real, y muy emotivo, yo mismo estoy pronto a irme de Venezuela y pienso en cosas como esta cada dia...
No es fácil.. pero muchas veces no queda otra opción, al ver a nuestros familiares con tantas necesidades... Estando fuera ayudamos mucho mas. Lamentable pero cierto. @mvangel94
Esto es algo que nos pone a pensar a todos los que tenemos pensado irnos del país. Dejar a la familia, no sabemos cuando regresamos, no sabemos si estarán todos los que dejamos, es realmente triste esta situación. Gracias por compartir este post @radac Saludos.
Muy triste pero la realidad que estamos viviendo miles de venezolanos. Gracias por tu visita.
Cruda realidad :(
Si amiga, lo que muchos venezolanos están viviendo. Saludos
Que triste y bella historia a su vez. La felicidad enmarco su regreso y la realidad marcó su partida. Gracias por esta historia. Saludos....
Así es amigo. Siempre nos vamos con la esperanza de volver, pero no pensamos que el tiempo pasa y las cosas van cambiando, y no tenemos en cuenta que cuando regresemos ya no será lo mismo que dejamos. Gracias por tu apoyo. Saludos