Ya no es suficiente sentir la otra boca, ahora el deseo urgente es sentir el otro cuerpo, ocuparlo. (...) Es deseo ferviente en el que el objetivo es la propia aniquilación a través de la fusión.
Cuánta intensidad se respira en el texto, muy descriptivo y erótico. Disfrute la lectura. Un abrazo.
Siempre me ha parecido que el sexo es la mejor metáfora de la vida, y seguramente el mejor regalo.
Gracias por pasarte y comentar, Psi. Un abrazo.