ATRACO EN UNA CAMIONETICA...

Un viernes por la tarde en Caracas, puede ser un muy motivador como también muy desmoralizante. Para mi aquel dia fue fue desmoralizante puesto que fui asaltado por tres hombres fuertemente armados en una camioneta de pasajeros(microbus), quienes se hicieron pasar por vendedores de caramelos y cuando nadie lo esperabas , cambiaron sus tono de voz amigable, por las amenazas de altos delincuentes, recuerdo como eran físicamente, dos eran morenos y delgado y el otro de tes blanca medio gordito, no sobrepasaban los 20 años, todos usaban gorras franelillas blancas y lentes oscuros, les confieso que cuando subieron a la unidad me dije estoy robado. En la camioneta ibamos como 15 adultos y tres niños.

Todo sucedió en menos de dos minutos, uno de ellos luego de terminar su oferta de 5 caramelos por 300, se ubico cerca del chófer, saco una pistola de la bolsa que cargaba y le grito al chofer ; Maldito vas hacer todo lo que yo te digo o te mato aqui mismo, te vas a parar en la escalera numero 3 como si nada pasara . Los otros dos se ubicaron a lo largo del pasillo pistola en mano, y uno de ellos hablo; Señores esto es un atraco el que se ponga bruto le meto un tiro en la cabeza y el que haga un intento de perseguirnos le va peor, asi que colabroen y entregue todo lo de valor, todo el mundo quedo paralizado, se podía percibir el pánico a simple vista, es una sensación de terror que solo puede compararse al ataque de perros salvajes. El delincuente que recolectaba arraso con todo, celulares, carteras, bolsos, zarcillos, cadenas y dinero, una señora se rehusó a entregar su cartera y el delincuente la golpeo por la cara, fue terrible, yo le dije colabore señora, el malandro me dijo cállate cabron... agotado los 2 minutos, la camioneta ya estaba casi en la escalera numero 3, volvieron a decir, el que nos persiga al bajarnos lo matamos. Todo estaba como cronometrado.

Se bajaron como si nada, se quitaron los lentes y las gorras, en la camionetica muchos pasajeros daban gracias a Dios y se presignaban, otros ni hablaban, un viejo valiente alzo la voz y dijo vamos a perseguirlo, le replique; usted esta equivocado aquí nadie se baja, arrancha chofer, el no lo dudo y el viejo valiente refunfuñando decía; aquí hay complicidad. Me baje mas adelante con temor porque pensé...

y si creen que fui su cómplice

Fuente: gogle+camionetica+imagenes