Cuando opté por mi cupo para estudiar en la universidad mi sueño era estudiar medicina, fantaseaba con ese momento en el que me recibiría y posteriormente trabajaría en el hospital atendiendo a niñitos que estuviesen enfermos y yo los ayudaría a mejorar o ayudando a madres a traer bebes al mundo. Por designios de la vida, cosas del destino o como pueda llamarse; termine optando por la carrera de Bioanálisis, se preguntaran ustedes: ¿qué es? Un Bioanálista es un profesional del área de la salud con capacitación técnica y científica. En algunos países se le conoce como Bioquímico o técnico de laboratorio, en fin, un Bioanalista puede ser microbiólogo, inmunólogo, hematólogo, bioquímico, entre muchas otras cosas geniales.

La cosa es que, cuando comencé no tenía muchos ánimos en seguir adelante, me matriculé con la esperanza de más adelante poder cambiarme de carrera y estudiar medicina. Pero jamás olvidare a unos profesores con los que me topé en mis primeros años de carrera que hicieron que mi percepción y mis ánimos cambiaran, pase de pensar que esta carrera era solo cálculos y números a sentirme realmente orgullosa de estudiar Bioanálisis, y es que un día en una clase uno de estos profes reflexionó:

“¿Alguna vez uno de ustedes se ha detenido a pensar que significa la palabra Bioanálisis?, la etimología de esta palabra es Bio= Vida y Análisis= Estudio detallado de algo desde su componente más pequeño hasta el más grande, eso son ustedes, Analistas de la vida”

Jamás olvidare aquella reflexión, pues me llevó a pensar en lo pequeña y simple de esta palabra y lo mucho que representa.

En nuestras manos está el ser promotores de una vida que pocos conocen la vida microscópica, la vida a través de unos oculares de un microscopio, esos oculares que nos permiten visualizar el interior de una persona, observar los organismos más pequeños con los que compartimos vida, llevar el estudio de la salud y del medio ambiente a un nivel que solo quien se inmiscuya en esta mundo tiene el placer de ver. Es lindo detenerse a pensar en todo lo que implica esta carrera no solo a nivel clínico sino también de investigación, esta carrera es tan noble y hermosa que siempre trabaja en pro de garantizar el bienestar de la humanidad sea en el estudio de alguna patología, en la busca de algún antídoto o medicamento o en la creación de alguna vacuna.

Quizás en otros países existirán otras carreras que también hagan esto y perdonen mi ignorancia al respecto, pero en mi país es así, y cuanto quisiera ver que el esfuerzo de tantos hombres y mujeres de Venezuela apasionados por la investigación, por la necesidad de descubrir cosas nuevas cada día sea recompensado, pudiendo trabajar y salir adelante, en su tierra, logrando tener el país que todos queremos, y la universidad que todos queremos.

Esto es solo un poquito de lo mucho que siento por mi carrera y por mi alma mater. Mis felicitaciones a esos Bioanalistas que aun trabajan incansablemente en Venezuela por hacerlo un mejor país a pesar de las adversidades, y si hay algún Bioanalista que me lee, le digo hoy día que me siento muy orgullosa de poder llamarle en un futuro, Colega. ¡Saludos a todos!