HABLEMOS Y DEBATAMOS DE DERECHO 3: LOS CONTRATOS INTELIGENTES ¿EL FIN DE LOS ABOGADOS?
El contrato, llamemoslo, "tradicional" es un acuerdo de voluntades entre 2 o mas personas, oral o escrito, para la realización de un acto jurídico, donde se establecen los derechos y obligaciones de los mismos.
Para que estos contratos sean validos se necesita que cuenten con ciertos requisitos como "la capacidad" (ej. la edad), "el consentimiento" (debe ser con discernimiento, intención y libertad), "el objeto" (que debe ser posible), y una "causa licita"
Como se sabe, los contratos se hacen para cumplirse, pero como también se sabe, esto no siempre ocurre.
Y, en casos de incumplimiento, se debe recurrir a abogados para lograr su cumplimiento ante la justicia o árbitros, y esto obviamente acarrea gastos.
Los contratos inteligentes nacen justamente para evitar estos intermediarios y, obviamente, una mayor rapidez.
Es decir, son instrumentos codificados y en un soporte digital, para que sean ejecutados o cumplidos sin la intervención de esos intermediarios o terceros a las partes contratantes y de manera automática.
Para dar un ejemplo: "Contrato de préstamo": Una parte entrega a la otra una suma de dinero con la obligación de devolverla en 12 cuotas, en fechas prefijadas y entregando una garantía propietaria para el caso de incumplimiento.
En caso de no cumplir con las cuotas en las fechas establecidas, el acreedor para poder cobrar debería ir a un abogado para que este ejecute ante la justicia la garantía propietaria.
En un contrato inteligente, podría almacenarse la información de dicha propiedad dada en garantía en este contrato dentro de una blockchain a través de claves digitales que dan acceso a las mismas, y en caso de no pagar se podrían revocar dichas claves y el deudor ya no tendría acceso a ellas.
Sería un sistema rápido, seguro (¿?) y sin intermediarios.
Esto es solo un ejemplo. Seguramente en un futuro los contratos inteligentes se irán expandiendo a múltiples situaciones.
¿Esto significa el fin de los abogados?
Pues si bien un mundo sin abogados sería el paraíso para muchos, guarden los fuegos artificiales para el próximo fin de año, porque esto es una utopía.
En primer lugar, no se podría prescindir de los abogados en la ejecución y redacción del contrato.
Si bien el contrato inteligente es un documento digital codificado (en el que supongo deberá intervenir un programador) la redacción de los mismos seguirá necesitando, y aun mas en estos casos, conocimientos especiales y legales, y mucho mas específicos aun que en los contratos tradicionales.
¿Y porque?
Porque como todos sabemos la información registrada en la blockchain no puede eliminarse ni modificarse, y una vez suscripto el contrato no puede hacersele enmiendas.
Así que si pretenden prescindir de los abogados en la redacción de los contratos prepárense para la bancarrota.
En segundo lugar, los contratos inteligentes, en algunos casos, no impedirían el reclamo judicial de alguna de las partes o de terceros que se consideren perjudicados por el mismo, y por tanto un juez podría revocarlo o declararlo nulo, debiendo las cosas volver al estado anterior de la ejecución del contrato.
Por mas contrato inteligente y blockchain que existan estos no pueden estar en contra de la ley.
Y en tercer lugar, por mas contratos inteligentes que existan, lamentablemente las personas seguirán robando, estafando, asesinando, violando, plagiando, peleándose con sus vecinos por la humedad de la medianera, divorciándose, peleando la tenencia de sus hijos, teniendo accidentes automovilísticos, etc etc etc.
Por tanto, si esperaban que con esta tecnología se terminaran los abogados, simplemente, OLVIDENLO.
Aunque si es cierto que los abogados deberán comenzar a estudiar y especializarse en estos temas, que si o si serán el futuro, de lo contrario se quedaran en el tiempo.