CREER O NO EN LA SUERTE, BUENA O MALA.
Se piensa que la suerte se la crean las personas de acuerdo a su actitud ante las diferentes actuaciones, las cuales pueden ser positivas o negativas, de eso dependerá la tan buena o mala suerte que se llegue a tener.
Quizás la razón por la cual creo en la suerte, más que todo ha sido por las vivencias de hasta ahora, puedo mencionar un ejemplo que lo demuestra claramente. Es un caso de dos estudiantes, uno con excelentes notas y otro con notas regulares que participan para una beca y se la gana el de menos nota, siendo que las bases para participar es precisamente tener las mejores calificaciones. ¿Qué puede creer ese estudiante excelente, que pueden pensar sus padres y profesores? ¡Qué mala suerte tuvo! será para una próxima oportunidad. También pudo haber una equivocación en el sistema, pero de igual manera tuvo mala suerte.
De manera contraria el alumno de calificaciones regulares está feliz y se siente dueño de la buena suerte y comenta con sus padres, amigos y profesores; oye, que buena suerte he tenido, me dieron la beca y no tengo las mejores notas.
En este caso ¿a quién culpamos? ¿a las personas que manejan el sistema? ¿al estudiante que se esforzó para ser el mejor de su clase? o ¿a la mala suerte?
Ciertamente, sabemos que nuestra actitud define en gran parte nuestra personalidad, que si actuamos bien por lo general nos irá bien, esto es una paradoja que se cumple de cierta manera y no cambia los acontecimientos fortuitos que nos ocurren a diario.
Realmente pensar que se tiene mala suerte no da cabida a que todo salga mal. Si nos estamos esforzando por lograr metas, por cumplir a cabalidad todos nuestros propósitos, a ser creativos, ser flexibles y perseverantes, intentar de nuevo cada vez que las cosas no anden bien, tener siempre la esperanza y la seguridad, seguir siempre adelante venciendo las dificultades y corrigiendo nuestros errores, ¿estaremos más cerca de tener buena suerte?
Pero si por el contrario todo lo anteriormente expuesto no está presente en tu proceder, pero sin embargo te va muy bien, consigues empleo sin buscarlo, te ganas la lotería a cada rato, participas en diferentes eventos y te va muy bien, entonces, ¿a que se le atribuye esto? ¿A la buena suerte? ¿Es una persona soltaría o como dicen por acá, bendecida?
Analizando este tema desde un punto existencial podemos decir que hay situaciones claramente establecidas y que sólo pueden ser atribuidas a la suerte, de la creencia en DIOS, del karma, la buena vibra, entre otros.
Si crees en la suerte, responde estas preguntas: 😉
- ¿Qué opinas de la buena y mala suerte?
- ¿Crees en maleficios?
- ¿Qué piensas de la superstición?
- ¿Eres una persona con suerte?
- ¿Crees que la fe mueve montañas?
La suerte puede ser definida como el resultado positivo de un suceso poco probable.
Hay por lo menos dos formas a los que se puede referir cuando se utiliza el término, en los que varían desde percibir suerte como una cuestión del azar, hasta atribuir a explicaciones de fe o superstición, como la organización sobrenatural de los sucesos afortunados y desafortunados.
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