El día de hoy vengo para contarles una pequeña anécdota de una guardia que hice recientemente, de esas que sabes que vas a recordar. Como se los he mencionado en un par de ocasiones soy estudiante de medicina, recien termine tercer año hace algunos meses. Para colocarlos un poco en contexto he de aclararles que los primeros años de carrera son netamente teóricos, es decir, que no tratamos con pacientes. Sin embargo, bueno yo siempre he sido una persona bastante curiosa y como tengo dos primas que también estudian medicina y que van mucho mas adelantada que yo, cada que puedo me apunto para ir hacer guardias con ellas, ya saben para ir viendo como es todo este asunto dentro del hospital. Y una de esas guardias es la que les voy a narrar hoy, porque aunque les parezca salida de una telenovela, he de decirles que bueno, de algún lado se inspiraron esas historias. Sin enrollarme más, preparénse porque...

Como les decía tengo dos primas que también estudian medicina, bueno en realidad una, porque la otra se graduó este año y trabaja en la Colonia Tovar, una pequeña población del estado Aragua. Como me encuentro de vacaciones ella me habia invitado en varias ocasiones para que aprovechara este tiempo yendo hacer prácticas con ella en el ambulatorio de la Colonia. He de aclararles que este sitio en particular es muy turístico, y a pesar de que fui en muchas ocasiones a "visitarla" siempre me dirigia al ambulatorio, la saludaba, hablaba un poco con ella y terminaba paseando por el pueblo, comiendo fresas con crema y bebiendo chocolate caliente, para luego regresarme a mi casita con el uniforme limpiecito y sin una arruga en el bolso. Digamos que técnicamente yo iba en plan turístico y no en mood estudiante.

Un día, me dije a mi misma, no puedes seguir en este plan, así que decidí quedarme para hacer una guardia de 24 horas con ella, y vaya que fue una interesante experiencia. El día había transcurrido bastante bien, hasta que a eso de las 12:30-1:00 de la madrugada llego una mujer con una herida de bala en la pierna derecha. Rápidamente mi prima se dispuso a atenderla, pero como ese ambulatorio no esta condicionado para ese tipo de emergencias, lo que ella hizo fue estabilizarla para que pudiera ser trasladada hacia el hospital mas cercano, que esta mas o menos a una hora de distancia, en la ciudad de la Victoria. Cuando estaba montando a la mujer en la ambulancia, llegó una camioneta de donde se bajo un hombre, pidiendo que por favor lo ayudaramos porque traia a un señor que se habia envenenado.

La noche a penas comenzaba y la emergencia del ambulatorio se encontraba bastante movida. Cuando entramos nuevamente en el ambulatorio, el señor de la camioneta nos explica que habia encontrado al señor con una botella de un extraño líquido de olor fuerte, que ellos asumian era gramoxone. Si como yo no tienes ni idea de que es eso, pues en esa ocasión me explicaron que el gramoxone es un herbicida que se utiliza para el control de la maleza, y es altamente tóxico si se ingiere, puede causar daños severos en el organismo cuando entra en contacto con la boca, estómago, esófago, intestinos, además de riñones e hígado. Y por lo que nos dijeron este señor habia ingerido mas de medio frasco del químico. Al alejarnos de los familiares mi prima me comento que era muy poco probable que ese señor sobreviviera, y de hacerlo tendría grandes daños en sus órganos. En efecto así fue, el señor falleció unas cuantas horas después, pero lo más impresionante para mí fue lo que sucedio en todo ese tiempo, el señor vomitaba sin control, se orinó y defecó encima, gritaba y gritaba desgarradoramente, una escena nada cómoda de observar.

Pero la noche no terminaba allí, cuando comenzamos a hablar con los familiares, a indagar un poco el cómo fue que este señor termino ingiriendo este producto, fuimos atando cabos y construyendo una trágica historia. Por lo que pudimos entender este señor era el esposo de la mujer que había llegado antes con herida de bala. Al parecer él había llegado borracho a la casa y comenzó a discutir con su mujer, a quién le disparó y suponemos que en medio del momento se sintió culpable, pensaría que la había asesinado o algo por el estilo y decidió suicidarse. Lo que nunca terminamos de comprender es cómo llegó uno primero y el otro después con personas distintas y que tampoco terminaban de comprender lo sucedido, ya que ellos alegaban que eran una pareja perfecta, que llevaban años de un matrimonio que por lo visto parentaba ser feliz, pero como diría mi abuela: "Nadie sabe las goteras de su casa, sino quien vive adentro".

Bueno amigos como ven a veces la realidad supera la ficción, espero que disfrutaran de este pequeño story time, un tanto trágico, que para a mi en lo personal fue una experiencia que me dejo varias enseñanzas, y me hizo reflexionar muchísimo. Y como se los mencionaba en un post anterior, esta labor no sólo se trata de tener un montón de conocimientos en tu cerebro, nunca sabes con que te puedes topar.