Una venezolana encuentra su pasión en tiempos de crisis...

En mi presentación a Steemit, les comenté que uno de mis talentos es la creación de accesorios para niñas (Cintillos y lazos). Hoy les contaré como fue que descubrí esta capacidad que anteriormente no sabia que poseía.

Era Diciembre del año 2017, Venezuela convertida en todo un desastre, las utilidades no alcanzaban ni para cubrir los gastos de la canasta básica (no muy distinto a la situación actual)... Ese año tampoco había podido disfrutar de las vacaciones escolares con mis hijos, pues estuve muy delicada de salud y pase todo el mes de agosto en la Ciudad de Caracas y luego mi recuperación fue bastante lenta, en fin, me preocupaba no poder complacer a mis pequeños por lo menos con algún detalle en Navidad, recordaba mi infancia y la emoción que sentía al abrir mis regalos, sentía frustración, pensaba... "No es posible que una profesional con un puesto de trabajo supuestamente digno no pueda vestir a sus hijos ni mucho menos darles un regalito en una época tan significativa del año"...

Mi hija de 10 años me había escuchado en varias ocasiones hablar de la situación y de nuestras condiciones económicas, un día se me acercó y me dijo "Mami el regalo que quiero para navidad es que me compres unos lazos hermosos para el cabello... eso no es tan caro". No le respondí, pero esa petición quedó resonando en mi mente... "Unos Lazos", inmediatamente una chispa se encendió dentro de mí, recordé haber visto en días anteriores en la red Facebook unos tutoriales para aprender a hacer lazos muy sencillos, tome mi teléfono y comencé a navegar en la red, todos los tutoriales que veía se me hacían super fáciles, así que salí a comprar el material necesario para intentar hacer el regalo de navidad a mi hija.

Mi niña (María José con 10años)

Recuerdo hice dos pares de cintas en color fucsia no muy bien terminados y con algunos detalles, a mi hija le parecieron preciosos, les tome una foto y los subí a mi perfil de facebook...

No había pasado una hora cuando tenia una gran cantidad de comentarios y preguntas sobre mis cintillos: ¿tu los haces?, ¿los vendes? ¿cuanto cuestan?... volvió a encenderse la chispa y no dude en ponerle precio a mis creaciones, esa semana hice mas de una docena, comencé así con nuevos diseños y colores, aprendiendo cada día una nueva técnica, no sabia que con mis manos podía hacer cosas tan lindas y las publicaciones en mis redes fueron mi mejor aliado.

Hoy en día gracias a la misericordia de Dios y la bendición que me ha dado de ser creativa y emprendedora sigo haciendo mis lazos, esta actividad es muy gratificante para mí pues al estar elaborándolos me relajo de forma increíble además ha sido una fuente de ingresos extra muy buena para enfrentar la terrible crisis económica de mi país, lo digo sin remordimientos a veces me provoca renunciar a mi trabajo y formalizar el negocio de los lazos, pues gano mucho más... pero se que en su tiempo Dios me dará la dirección y será su voluntad la que haga...

Para finalizar les cuento que hoy en día pienso que yo ese diciembre estaba tan preocupada por los regalos de mis hijas y una de ellas fue quien con su petición me dio el mejor regalo de Navidad y este regalo se convirtió en mi pasión de hoy en día... No olvidemos que la constancia y la perseverancia hacen la diferencia, a veces con las cosas más simples podemos resolver grandes problemas... Un Abrazo!!