marriakjozhe, muy triste tu poema pero hay una realidad: nacemos, crecemos, nos desarrollamos, envejecemos, nos enfermamos y morimos. Son los seis pasos reales de la vida, nadie los puede evitar pero sí podemos hacerlos dignos con nuestra actitud: dando fruto como el árbol cerca del río, sin olvidar que en realidad somos eternos y que sólo morirá nuestro "estuche externo" cuando ya no nos sirva, para dar lugar a nuestra transcendencia a otro plano.