En una ocasión, la amistad se encontraba en sus rondas de trabajo acompañada del amor que por primera vez trabajaban juntos, debido a sus relaciones laborales ellos debían compartir sus habilidades, destrezas y apoyarse mutuamente para lograr satisfacer las necesidades de su clientela.

Un día muy temprano por la mañana se les asignó un cliente de nombre José Betancourt, quien era un joven muy inteligente, de buena familia y que gozaba de una buena vida, sin embargo el tenia ciertos dilemas en cuanto a los sentimientos debido a que no conocía mucho de ellos; él muy a menudo se preguntaba

¿Qué sentimiento será más importante el amor o la amistad?

El amor y la amistad al enterarse de la pregunta tan interesante que tenía el joven, inmediatamente convocaron una junta, para discutir y conseguir la respuesta adecuada para tan importante interrogante; en aquella junta intervinieron todo tipo de sentimientos tanto buenos como malos, entre ellos estuvieron:

Cariño

Felicidad

Odio

Envidia

El amor fue el primero en participar diciendo:

—Estamos aquí todos reunidos para discutir sobre que sentimiento es el más importante.

Luego, la amistad dice:

—No solo se trata de quién es el más importante, sino de mantenernos unidos.

Todos en la junta comenzaron a murmurar, y las voces que se lograban escuchar decían:

— Yo creo que el amor es más importante.

— Es obvio, la amistad es mucho mejor que el amor.

Y de otros se escuchaba:

— ¡Qué tontos, los seres humanos no necesitan ni del amor ni de la amistad para vivir! — exclamó el odio.

—Es cierto, nosotros no tenemos nada que hacer aquí— dice la envidia, y con una risa burlona los dos se dirigen hacia la puerta y se marchan.

—Tranquilos, hagan silencio por favor—  interviene rápidamente la amistad, pero el amor muy confiado, la interrumpe diciendo. 

—Yo les diré quién es el más importante; ¿es que no lo ven?, ¡yo lo  soy!, ¿por qué existes tú sí estoy yo?— le pregunta el amor a la amistad.

—Una interesante pregunta con una fácil respuesta. Yo existo debido a ti, porque yo regalo sonrisas y tú en cambio, dejas lágrimas; yo soy el consuelo de lo que tú provocas— responde la amistad muy sabiamente.

—Pero, si tu existes debido a mi y te necesito para que arregles mis malos actos, entonces ¿quién es el de más valor?— le pregunta.  

—Tú mismo te acabas de responder a tu duda. Ninguno es más importante que el otro, yo soy tu complemento y tú me necesitas, entonces, ¡todos somos importantes!— contesta muy alegre la amistad.

—Tienes razón, ahora me doy cuenta de que todos somos importantes— dice el amor abrazando a la amistad, mientras todos en la junta aplauden.  

Al final de la historia todos los sentimientos se volvieron unidos, incluyendo al amor y a la amistad, quienes se hicieron mejores amigos y permanecieron unidos hasta el sol de hoy.