RE: Nuestras mascaras para convivir
Me gusta mucho tu post, y si ciertamente complacer a los demás es una de las formas más duras que tenemos para volvernos, en cierta forma, esclavos, lo puedo decir a ciencia cierta porque es algo con lo que constantemente lucho.
En el transcurso de mi vida me he dado cuenta que es imposible, que Dios nos creo de una manera particular y tenemos una parte de Él en nosotros, así que para que seguir luchando por parecernos a alguien que no somos, si somos un diseño único.
Que si los cambios son buenos?
Claro que si, porque aunque tenemos un diseño semejante al de Dios, no somos perfectos, y se trata de buscar parecernos más a Él y buscar para otros los beneficios tanto como los queremos para otros, eso requiere un gran trabajo para esforzarse, pero es un trabajo en amor desde quien somos, no desde el parecer "ser".
En este caminar de soltar el perfeccionismo, he descubierto que cada uno de nosotros tiene algo tan particular que aportar, incluso, sólo siendo nosotros mismos.
Entreguemos de eso que se nos dio, sea lo que sea, seamos una bendición.
Me encanta que tu comentario este atado a una verdad singular, somo semejantes a nuestro creador, pero hay algo interesante, somos seres dinamicos y siempre estamos cambiando, y no podria tener mejores palabras en este momento que las de un buen hombre que dijo:
"El trabajo más grande de su vida es usted. La mayor parte de su vida está aún por delante. ¿Qué hará con su vida? ¿Cuál será su trabajo más grande? ¿Cuál será su creación más importante? Yo se lo voy a decir: su trabajo más grande, su creación más importante, será usted mismo.
"¿Puede ver en su mente quién quiere ser? ¿Lo sabe?
"A medida que considere la pregunta sobre qué clase de persona será, debe entender el proceso dinámico de la vida. Usted no solamente cambia sino que está cambiando todo el tiempo. A veces las personas no creen esto. Se excusan por sus fracasos y debilidades diciendo 'Yo soy así', 'Tengo mal carácter, soy impaciente'. 'No puedo levantarme temprano, yo soy así'. 'Es mi naturaleza'. O, 'Soy tímido, es todo, así soy yo'. 'No soy una persona espiritual', etc.
"Creer que las debilidades y las deficiencias del carácter no se pueden cambiar es rechazar la verdad primordial del plan de salvación. No estamos grabados en piedra. No solamente podemos cambiar sino que cambiamos todo el tiempo. Usted es dinámico, cambiante, un ser que evoluciona. Está siempre cambiando. Nunca es el mismo. Nunca permanece inalterable.
"Ahora mismo usted es la suma total de lo que ha pensado, dicho, visto, escuchado y hecho. Lo que piensa, dice, hace, escucha y ve, hace que usted cambie. Que cambie para bien o para mal, para volverse más fuerte o más débil, para internalizar las cualidades de la luz o de las tinieblas. Usted es responsable por quién es y es responsable por en quién se está transformando. Sabe en qué clase de persona se está transformando? Ve en su mente quién quiere ser? Lo sabe?
"Jesús hizo una pregunta similar. El dijo: '¿Qué clase de hombre debéis ser?' (3 Nefi 27:27) En esta ocasión particular Él estaba hablándoles a los discípulos nefitas por eso habló en masculino, pero la pregunta aplica a todos. Él le pregunta a usted: '¿Qué clase de persona debes ser?' Después, contestando su propia pregunta dice: 'Aun como yo soy'.
"Jesucristo no sólo vino a morir por nuestros pecados, Él también vino a mostrarnos el camino. El dice: “Yo soy el camino”. No solamente tenemos que ser como Él, sino que tenemos todo en nuestro favor para poder hacerlo."
Estoy de acuerdo, en Jesus somos suficientes para cambiar y ser mejores, cada vez pareciendonos mas a El.
El amor del Señor tiene un poder transformador y se que principalmente desea tenernos cerca de El, esa sea tal vez la verdad mas bonita, saber que aunque Dios no te necesita te ama, le gusta estar contigo, y te quiere llevar a un mejor lugar.