Y cubierto de espuma sangrienta su morada.
Solo besaste manos
Y envíalo a las rocas rosadas,
"En la vida, lo otro no es necesario.
Cafe Las afueras Medianoche en el reloj.
La ventana subirá, más cerca de la luz,
A este dolor que me fue causado con tanta pasión.
Pasando por la eternidad y los mundos.
A las heridas desgarradas del alma.
Traeme otra cerbeza.