Un cuento corto hablado. Para aquellos que no les gusta leer y prefieren escuchar. Se encuentra también la versión escrita en steemit . Espero les guste, iré subiendo otros

La nota

La mesa es dura, el bar oscuro, el vaso transpira una gota negra como la noche que cada vez se cierra más sobre mi.
Debería decir que esta es mi última copa y que he escrito una prolija nota de suicidio. Y esa es la razón porque estoy recordando mi vida. Quiero tener claro cada momento cuando pase todo delante de mis ojos. Según dicen así ocurre.
—Tiene que pagar la consumición —dice amablemente la moza— estamos cerrando la caja.
Le miro las piernas, lo hice toda la noche. No importan los buenos modales cuando se escribe una última nota. Me recuerda a ella, tal vez como camina, o porque simplemente me quiero dar el gusto de recordarla.
—Era esperable, con la anestesia falló el corazón, no pudimos salvar al feto —dijo el doctor simplemente, como mencionando sólo un número más.
Bebé, hijo: Quise gritarle en la cara, pero callé.
Tomo otro trago de cerveza y saco la billetera.
—Quédate con el vuelto —le digo.
—Es usted muy amable señor.
Casi rio a carcajadas.
Salgo del bar, la noche es apretada y oscura, la noche justa. Por la misma vereda y de frente, viene alguien caminando, apura el ritmo para pasar rápido a mi lado. Viste de saco y corbata, apenas levanta la mirada y entreabre la boca.
—Bebé, hijo —le digo mientras le gatillo en la cara.
Explota el disparo y el rostro.
—Bienvenido a este lado del abismo —grito, y cae a mis pies.
¡Espero que la nota este bien redactada!, pienso.