Vive la vida.

Siempre se ha dicho que la vida se vive una vez pero ¿cuántas de esas veces así se ha hecho? siempre nos guardamos algo y eso es lo malo de que como realmente se debería ser. Vivir cada momento explosivamente y no dejar nada para después porque si en el momento tienes la oportunidad deberías de hacerlo así ya que no siempre tendrás la oportunidad de repetirlo y volverlo una realidad, un abrazo, un beso, un te quiero o te amo. Todo el afecto que tengas suéltalo y no nada más eso también si quieres hacer algo físico aplica igual porque todo es posible en esta vida, nada está fuera de nuestro alcance si así lo deseamos sólo queda en uno mismo el lograrlo porque lo único que nos estorba y detiene es nuestro miedo y fracaso lo cual viene sobrando al final cuando al fin lo realizas y sientes esa satisfacción de haber hecho todo lo que has deseado, de haber logrado cada cosa y motivarte a más cada día, así que ¡vive! y vive bien que está esta vida sólo la viviremos una sola vez y si no sacamos el máximo provecho ahora cuando tengas la oportunidad sino nunca podrás hacerlo. Se tú mismo has todo lo que deseas y sigue viviendo para ti nunca para complacer a los demás.

Muchas personas viven con monotonía sin pasión, no se dan de cuenta del gran tesoro que Dios les dio. La vida no suele ser fácil, está llena de obstáculos. En todos los caminos que tomes siempre habrá problemas, pero eso es lo que hace bonita a la vida, ya que mediante a esos obstáculos tú te vuelves más fuerte y audaz. Convéncete de que vale la pena vivir la vida con pasión, sin miedos, el valor que tiene es muy importante como para andar siempre infeliz, pendiente de lo que digan o hagan las personas, crea y buscas objetivos en tu vida, eso hará tu vida mejor. La vida es un viaje, está lleno de caminos nuevos unos divertidos otros felices hasta dolorosos; y eso lo hace interesante. Debes saber cómo regir los valores que te rige la vida, debes saber que debes tener tiempo para ti mismo, como darle amor para los que te rodean, respalda lo que crees y no dejes que los demás te avasallen. Es posible hacerlo y aún ser abierto con las ideas de las otras personas, ya que pueden sorprenderte.

Arriésgate, vive la vida al máximo, olvida todos los temores que tengas, ya que esos son los que te detienen a ser feliz. Sé capaz de reconocer cada uno de tus miedos y enfréntalos. Sé honesto contigo mismo y con los que te rodean, si no lo eres tú mismo vas a mermar la confianza e intimidad de los demás. A veces mentimos al sentir celos, envidia, confrontación o miedo de algo o por alguien. Pero si logras ser honesto contigo mismo, con los que te rodean también lo serás, y eso te ayudará a vivir una vida más enriquecedora y plena. Debes aprender a aceptarte, siempre estamos pendiente de lo malo que tenemos, de lo que queremos cambiar, pero nunca vemos las fortalezas que tenemos, y ese es otro error grave que cometemos, porque nos menospreciamos, no nos valoramos, prestar atención a tus fortalezas puede ayudarte a continuar desarrollándolas sin centrarte en ti mismo como un “fracaso”.