7 nombres, 5 idiomas, 3 países, 2 hijos

Mi mamá tenía 7 nombres, hablaba 5 idiomas, 3 de ellos a la perfección, sus países fueron también 3: Italia, Chile y Venezuela. Se graduó en 2 carreras. Tuvo 2 hijos: Mishki e Inti. Se enfermo de cáncer, se curó del cáncer, y murió de cáncer. La enfermedad nunca la venció, aunque determinó el final de su vida, jamás pudo hacerlo con sus ilusiones. Se casó 1 vez, se enamoró varias. Leyó miles de miles de libros. A veces pienso que nació en una imprenta. Uno de sus hobbies era recortar artículos de los periódicos y ponerles un nombre. Si la conocías y eras parte de sus amigos o familia, tarde o temprano recibirías un recorte para ti, con información mágica que podría salvarte la vida o solucionar un problema o darte información clave de tu profesión o un nuevo trabajo perfecto o una casa en venta que terminarías comprando o… era un ángel de la información.

Usaba lentes, tenía los ojos más azules que el mar Caribe en julio. Sus amigos la amaban. Sus vecinos no la comprendían. Ayudó a más personas en su vida que 20 ONG financiadas por miles de millonarios noruegos. Todo el que la conoció tiene una gran historia que contar de ella. Sus regaños eran profundos, duros, dulces, sabios, graciosos, emotivos y en un tono muy distante al grito. Que extraño, al escribir esto trato de recordar si gritaba y no encuentro momentos en mis neuronas, seguro que lo hizo, no lo recuerdo. Una vez llegué a las 7.00 de la noche, estaba en Venezuela, se encontraba sentada al final de la casa, no había ni una luz encendida, me abrazó muy fuerte y lanzó a llorar como nunca la vi en mi vida, mi abuelo había muerto esa tarde en Chile. Y más que lágrimas de tristeza, era un vacío muy difícil de explicar, ella siempre se llevó muy mal con su papá, eran dos personas antagónicas, en una novela de misterio serían el asesino y la gran detective, aunque suene a cliché, eran la princesa Leia y Darth Vader. La eterna rebeldía contra el orden total. El anarquismo delirante e imposible versus el fascismo delirante e imposible. Quizás exagero un poco, o quizás mucho. Pero ese día en la casa de mis padres, las leyes de la física crearon un pequeño agujero negro que fue cerrado al día siguiente por el entusiasmo infinito de mi madre. Mi mamá se lamentó esa noche por no haber logrado cambiar a su padre, y hacerlo más humano. Había fracasado en ayudar a la persona que debería haberla ayudado a ella toda su vida. Una paradoja.

Mi mamá tenía 2 perros, llamados Yahoo! y Java, bueno, que pueden esperar de la influencia de un hijo que estaba terminando la ingeniería en informática justo cuando el Internet estaba naciendo en nuestros países. Sigamos, mi mamá tenía 2 perros, 2 tortugas, 1 gato y cientos de pajaritos libres que alimentaba todos los días. Las tortugas eran Pachulo y Pachula, dos morrocoyes que tenían más edad que cualquiera y la gata se llamaba Cuchita. Cuando mi mamá se curó del primer cáncer, y regresó a Venezuela, Yahoo!, el pastor alemán que nos había regalado mi amigo francés, no podía creerlo, saltó, ladró, hasta habló. Nunca en toda mi vida vi a un perro sonreír y tener tanta felicidad dentro, fue increíble, es una escena como para el final de una película. Pero lamentablemente los guionistas de la vida tienen otras ideas al escribir nuestras historias. Hay mucho más sobre mi mamá, miles de cosas más. Hoy vi tres fotos de ella que me removieron el alma, y quería compartir un poco con ustedes algunos recuerdos. Y probablemente, de alguna forma, este sea un recorte de periódico, y aunque ella quizás no te conoció, seguro que le puso tu nombre.

(Escrito originalmente en Facebook y Medium luego de conmoverme al encontrar unas fotos muy viejas de mi madre)
https://medium.com/espanol/7-nombres-5-idiomas-3-pa%C3%ADses-2-hijos-b0bc5c03ccc8