Los contratos inteligentes o "smart contracts"
Imagínate que trabajas para una empresa cualquiera, Telefónica por ejemplo. Todos los meses, como figura en el contrato, esperas recibir el salario correspondiente a la labor que desempeñas. Que recibas este dinero o no, sin embargo, depende exclusivamente de la voluntad de tus superiores. Pueden pagarte y probablemente lo hagan, pero podrían no hacerlo, aunque incumpliesen el contrato que firmaste. Para recuperar tu dinero necesitarías imponer una denuncia y llevar el problema al terreno judicial. Una vez en el juicio, puedes ganarlo, o no. La empresa, sobre todo si es grande e influyente, podrá influir el veredicto del juez con su poder y contará con la ayuda de los mejores abogados para salir airosa. Tú, sin embargo, eres un trabajador más que depende del arbitrio y principios morales de otro ser humano, de otro ser corruptible.
Este tipo de contrato es centralizado. Aunque se firme entre dos partes, el poder recae sobre la empresa, que, podríamos decir, es la sede del contrato. ¿Por qué no te pagan a principios de mes y luego ya trabajas? Porque quieren tener la sartén por el mango, claramente. Sin embargo existe otro tipo de contrato descentralizado, uno en el que no dependes de nadie para que las condiciones se cumplan. Se van a cumplir con toda seguridad. Conocidos como smart contracts o «contratos inteligentes», constituyen la base de la tecnología blockchain de algunas monedas como Ethereum. Son contratos basados en código informático que se ejecutan a sí mismos y aseguran que todas las partes involucradas van a respetar las condiciones. Una vez creados, ninguna persona (ni siquiera su creador), puede cambiarlos. De hecho, si existiera algún error en el código, habría que empezar a escribir otro smart contract desde cero y desechar el anterior.
Por ejemplo, supongamos que fundas una empresa y necesitas pagar por su trabajo a tus cinco empleados. Por simplicidad, supongamos que vamos a pagarles por igual. Imagínate que tienes 10000€ para pagar a todos. Siguiendo un contrato centralizado, podrías pagar más al empleado A, que te cae bien, que al empleado B, al que tienes manía. Sin embargo, con un smart contract te asegurarías de que, una vez redactado el código e ingresado el dinero, se va a repartir equitativamente entre los empleados si todos cumplen con las tareas que figuran en el contrato.
Pero eso no es todo. Los smart contracts también se pueden utilizar para repartir herencias de manera automática de acuerdo a unas condiciones preestablecidas, y para realizar transacciones y adquirir propiedades sin depender de intermediarios, sin que un notario «dé fe». Todo esto haría muchísimo más eficiente el sistema administrativo, el financiero, el político (sobre todo para automatizar el proceso de votar en las elecciones), e incluso el judicial. En definitiva, los smart contracts ofrecen un maremágnum de posibilidades que, muy probablemente, impulsará el mercado de las criptomonedas hasta la exosfera.
- Hyperion
Interesante artículo. La aplicación de los smart contracts al mundo laboral, para asegurar los pagos me parece una buena aplicación. Sin embargo me surgen dudas. ¿ como aseguramos que el empleado haya realizado su trabajo correctamente ?
Respecto a lo de adquirir propiedades sin un notario, lo veo difícil. En la mayoría de los países se require de un registro de la propiedad y un notario, por ley, para que haya un cambio de propiedad legalmente. Dudo que vayan a modificar las leyes para admitir contratos en Ethereum, al menos a corto plazo.
No obstante, estoy de acuerdo en que las posibilidades son alucinantes.
Para asegurarnos de que un empleado ha realizado su trabajo correctamente se podrían establecer objetivos verificables para cada día laboral. En algunos trabajos no se podría implementar, pero en otros sí. Por ejemplo, si eres programador y tienes que crear X programas al día, cuando acabes, puedes anotarlo en el smart contract para que guarde la información y te recompense a final de mes. Si no lo haces y mientes al smart contract, al final te acabarías delatando, pues los clientes reclamarían al no haber recibido sus programas.
Respecto a lo de adquirir propiedad sin notario, es díficil de momento, sí. Pero en el largo plazo, no lo veo descabellado con el auge del mercado de las criptomonedas.
Buena información, gracias por compartir. Saludos.
Gracias a ti por leer, Goya. Saludos.
@hyperion Gracias por compartir este articulo, muy bueno conocer sobre los contratos inteligentes.
Esto representa una forma mas segura de hacer contratos. Ya hay plataformas que se puedan usar para hacer estos contratos? o empresas q ofrezcan este servicio?
Me alegro de que te haya gustado, @alebeta.
La principal plataforma que usa los smart contracts es Ethereum, pero la tecnología de Bitcoin también se base en gran parte en ellos. Aquí tienes un vídeo que los explora con más detalle:
Un saludo.