La cultura Chavín nos ha dejado multiples enseñanzas de adoración a Dioses, edificaciones grandiosas y con experiencias que solo ellos pudieron experimentar, como el uso de alucinógenos.

Lo que se ha encontrado en su ciudad, ha sido desenterrado a lo largo de varios años y con el cuidado apropiado que por mucho tiempo no se pudo hacer. El huaqueo, es uno de los terrores de todo aquel que preserva las culturas en el Perú y se sabe que ha existido como un mal que ha perjudicado a diversas riquezas e historia intacta.

Se han perdido joyas hechas a base de oro y plata, así como vasijas de barro y bronce. Una de los elementos que se han podido rescatar y que con apoyo del Ministerio de Cultura del Perú, se ha podido restaurar y resguardar.

Ornamentos hechos de Piedra

Una representación de la adoración a los Dioses y que se encontró dentro de los alrededores del gran centro sagrado de Chavín. Se dice que reflejaba el llamado al altar para estar frente a la deidad. Ésto por el símbolo del Pututu (Caracola marina) que era un instrumento de viento que emitía un gran sonido y que atraía la atención de todos los peregrinos.

Tallado en piedra y que representa a los seres sobrenaturales que se observaban al estar en trance por el uso de los alucinógenos. Las expresiones religiosas son símbolo de esta cultura y se ven representadas en sus muros decorados en el fervor de ellos.

La imagen gigantesca del Dios grande y poderoso, representado por las alas alrededor pero que en sí representaba el poder y gran valor de él sobre los demás. Éste estaba graficado con la imagen de un cóndor con grandes alas, colmillos y con un pico sobresaliente. Todo a la imagen del Dios y su grandeza.

El recorrido se encontraba decorado con imágenes que representaban a animales, en su mayoría felinos que eran retratados como las alucinaciones que se registraban al estar cerca a la deidad. Todo esto era de gran valor religioso y arquitectónico ya que los Chavín no solo brillaron por su religiosidad sino por los grandes trabajos en piedra labrada y decorada.

Cabeza de cóndor labrado en piedra lisa y que se encontraba en los anexos de la gran muralla y que estaba destinado a la adoración de los peregrinos que llegaban allí. Se indica que Chavín era el lugar principal de la fuente de fe en aquellos tiempos. Que muchos de los peregrinos que llegaban eran de lugares lejanos y que sus viajes podrían tardar diversos meses.

Vasijas de piedra que eran usadas en los ritos religiosos y donde se aplastaban las plantas que luego serían tragadas o inhaladas como parte de los ritos. Se colocaban las plantas sobre la base de piedra y luego con una piedra redonda, se aplastaban para luego ser usadas. Ésta es una práctica que se sigue usando y que se le conoce como Batán, que es una artículo de piedra para el uso dentro de las cocinas de las zonas andinas en el Perú.