Las sociedades humanas y los duendes encantados.

El ser humano siempre ha creído en seres fantásticos que no siempre son visibles o que no se dejan ver con cualquiera. Este es el caso de los gnomos y duendes. Todas las culturas desde Europa, Asia, y América registran la existencia sobrenatural de seres pequeños del tamaño de un niño, que se apoderan de las casas, o simplemente viven en los bosques. Se les ha llamado duendes, goblins, hoblin, leprachaun, brownie, entre otros. Son descritos por la mayoría de las culturas desde la época del imperio romano y los druidas como seres tremendos, a veces alegres, pero muy vengativos y de naturaleza maliciosa que se interesan sobre todo en jugar con los niños, e inclusive llevárselos bajo engaños y desaparecerlos. Se interesan por los seres humanos y por todo lo que hace, inclusive por su amor al oro y las escenas de amor con sus mujeres. No todos parecen ser malos; los gnomos parecen diferenciarse de los duendes que son algunos realmente malignos. A algunos les encanta ordenar la casa, ya que no toleran el desorden, y en países como suiza, los veían como disciplinados trabajadores que podían ayudar a quienes congeniaran con ellos. Durantes los siglos XII al XVI, fueron clasificados por demonólogos como pequeños demonios, incluso hay historias terribles sobre pueblos o aldeas asoladas por sus hechizos, maldades y bromas. Lo cierto, es que hasta el día de hoy, hay personas que aseguran haber visto un duende en su vida, e inclusive de haber interactuado con ellos.

Esperando que les haya gustado, toda mi gratitud con los hermanos de steemit.