EMPIEZA EL 2018 CON PIEL DE SEDA
*A cada tipo de piel, su cuidado
Para cuidar su piel teniendo en cuenta su naturaleza, asegúrate de elegir primero los productos adecuados para tu tipo de piel. La piel seca tiene diferentes necesidades de la piel grasa.
*Presta atención a las zonas más sensibles
Algunas partes del rostro (ojos, labios, etc.) tienen una piel especialmente fina y frágil. Requieren de un cuidado especial.
*Una limpieza suave
El cuidado de la piel sensible comienza con la limpieza. Para no atacar la piel y conservar su equilibrio, utiliza desmaquillantes fisiológicos, especialmente formulados para cuidar su piel con cuidado.
*El contorno de los ojos, una zona de riesgo
La piel del contorno de los ojos es diez veces más fina que la del resto del rostro. Para su limpieza, elige una rutina específica
*La exfoliación es indispensable
Una o dos veces a la semana, recuerda usar un exfoliante adaptado. Debe ser eficaz, a la vez que suave y respetuoso con la piel. Elige una exfoliación fisiológica, ideal para suavizar y purificar la piel respetando su equilibrio
*La hidratación es esencial
La dermis está compuesta en un 70% de agua, y la epidermis en un 15%. Para mantener un buen nivel de hidratación, es importante utilizar un cuidado diario hidratante que equilibre el nivel de agua en el corazón de la piel.
*Escoge, preferiblemente, un maquillaje hipoalergénico
Para evitar el riesgo de alergias asociadas con el uso de un producto que no se adapte a tu piel, elige un maquillaje hipoalergénico especialmente formulado para satisfacer las necesidades de todos los tipos de piel, incluso las más sensibles.
*Protégete del sol
Sea cual sea la estación del año, elige un cuidado diario que incorpore un filtro solar. Te permite mitigar los efectos adversos del sol, acelerador del envejecimiento cutáneo.
*Cuidado con las agresiones externas
La contaminación, el tabaco, el estrés ... todos tienen un efecto adversos sobre la piel. Ten en cuenta estos factores para proteger tu piel antes de salir de casa.
Muy importante, limpia tu piel por las noches, incluso si no te has maquillado durante el día.
*¡No te olvides de los labios!
Cada vez que lo necesites, aplícate una crema reparadora para los labios. Reaplica el producto cuantas veces quieras ya que este área es particularmente frágil