3. Agradecer y perdonar van de la mano:
Si realmente te enfrentas a la necesidad de perdonar y no lo has logrado, piensa en esto, cuando una persona perdona, se libera de un peso que en un primer momento no debería afectarle, al perdonar sanamos, más allá de las razones religiosas que son de bastante peso en muchas culturas, está el bien de nuestra propia vida, y perdonar, de verdad, es importante, así como agradecer, agradecer por todo, ya que la persona que es agradecida, no es agradecida por la situación grande o pequeña que enfrenta, agradecido es el que tiene agrado por ser, si, el que es feliz por ser, por existir, y al ser feliz encuentra placentero perdonar para sanar, y seguir adelante, e incluso puede llegar a agradecer la oportunidad de poder ejercitar el perdón.
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Me gustó todo y muy cierto. ¡Buen post!