¡Vive Un Día A La Vez!
Hay circunstancias de la vida que nos obligan a tomar decisiones que a pesar de saber que no son las mejores opciones creemos que son las correctas, todo por el bienestar de mi familia, sin embargo, no nos damos cuenta como nuestras acciones afectan negativamente y a la larga; el tiempo en algún momento de la vida nos pasara factura.
Nunca imagine que llegar a la vejez seria tan deprimente y solitario, nunca me detuve a pensar por un momento como seria mi vida cando llegara a viejo, hoy en día vivo solo, no tengo amigos ni familia con quien conversar ni mucho menos en algo en que dedicarle mi tiempo, vivo día a día en un mundo oscuro embargado en una inmensa soledad.
Hoy quiero compartir mi lección de vida con ustedes ya que no se en que momento me volví invisible para los demás
Mi nombre es Robert Montenegro tengo 71 años de edad soy padre de 8 hijos y abuelo de 18 nietos vivo en Venezuela en la ciudad de Mérida. En el transcurrir los años cuando era joven me dedique casi toda mi vida en hacer arte en la reparación y restauración de vehículos, profesión que dedique por varias décadas, en aquel momento la moda era tener un carro muy brillante, reluciente y de lujo, pasaba horas tras horas sumergido en el taller para satisfacer la demanda que existía en aquellos momentos dorados, me convertí famoso por mis diseños, situación que me permitió vivir plenamente manteniendo una calidad de vida sin contratiempos.
En la década de los 80, la situación económica de mi país se vino en decadencia y al tener hijos de poca edad, me obligo a esforzarme mas por ellos y así cubrir mis necesidades y la de mi familia, trabajaba constantemente por mas de 14 horas diarias y en ocasiones me quedaba en el taller para poder culminar pedidos de los clientes ya que tenia mucha demanda de producción hasta el punto que pasaban días sin dormir en mi casa.
Mi esposa Emily antes la circunstancias, discutíamos a cada rato porqué pensaba que yo tenia una relación fuera del matrimonio, esta situación provoco poco a poco el quebrantamiento de mi relación con ella y mi familia, con el tiempo mis hijos fueron creciendo y rehaciendo sus vidas, la mayoría de ellos viven fuera del país, y los otros que quedan no tengo idea donde pueden estar en estos momento y tengo mucho tiempo que no se nada de ellos.
Al morir mi esposa hace casi 4 años, por padecer cáncer de pulmón, me he sentido muy triste y desconsolado ya que no tengo como expresar mis emociones. hoy siento envidia al ver a mi mejor amigo a lo lejos como disfruta de su familia, correteando a sus nietos ya que se la pasa saltando de un lado a otro por toda la casa. Pero muchos de mis nietos ni siquiera saben quien soy yo y otros ni saben si yo aun existo, todos los días para mi son iguales la rutina me consume y me esta matando, solo le pido a dios que se acuerde de mi en cualquier momento y así poder estar en el mas allá con mi esposa.
Un día revisando el álbum fotográfico familiar, encontré muchas fotos que nunca había visto y lugares que ni siquiera he conocido por un instante pensé que ya estaba padeciendo de alzheimer porque no recordaba cuando había sucedido esto y donde eran esos bonitos lugares, me pregunte por un instante donde estaba yo ya que mi rostro no aparecía en ninguna de esas fotos, al ir hojeando el álbum de los recuerdo veía con claridad como mi vida paso sin darme cuenta me convertí en una estrella fugaz para mi familia que dio una estela de luz pero al final desapareció, de pronto cae al suelo un pedazo de papel y era una carta de mi esposa la cual decía lo siguiente:
Viejo, mi eterno amor de mi vida si algún día encontraras esta carta para entonces sera demasiado tarde, porque el bus de la vida ya partió sin ti por no llegar a tiempo a la estación, por muchos años te pedí incansablemente que lucharas por tú familia y fueron muchas peleas en esos momentos, te rogué porqué me sentía sola y tú familia necesitaba de ti, tuve que criar a mis hijos sola asumiendo mis dos roles de padre y madre al mismo tiempo y poco a poco logre sacar a flote a mis hijos sola porque tu nunca estuviste allí solo de forma figurado, siempre para ti fue mas importante el trabajo, el dinero y las fiestas que se realizaban en tu honor, sin embargo, me toco vivir momentos muy difíciles y necesitaba de tu apoyo en todo momento.
Hoy en día tus hijos te odian y para ellos no les interesas, porque nunca estuviste presentes en sus vidas, poco a poco yo también los fui perdiendo a ellos ya que el amor que siento por ti me segaron ante las circunstancias porque tenia la esperanza de volver a tener aquel esposo cariñoso y amoroso y ese padre ejemplar que solías ser, hoy en silencio sufro de una enfermedad silenciosa llamada cáncer pulmonar y poco a poco mi cuerpo se deteriora y no sabes lo mal que me siento tanto físicamente como emocionalmente, diariamente veo como mi cuerpo se deteriora y ya siento como esta vela encendida esta a punto de apagarse, lo peor es que por mi ceguera hacia a ti me aleje de mis hijos y de mis nietos y por supuesto del hombre que ame y amare toda la vida. Viejo mi agonía la sufro por dentro en silencio y trato de ser lo mas fuerte para no mostrar lo débil que me siento con el fin de seguirte apoyando, pero para cuando leas esta carta ya no estaré a tu lado, gracias mi viejo por regalarme a mis hijos y hacerme especial cuando te conocí
A veces nuestras actitudes y decisiones son las responsables de nuestras consecuencias, sin embargo no tendrás la oportunidad de remediarla, el factor tiempo es implacable al exigir justicia divina, a la velocidad que vivimos no nos permite detenernos por un instante y preguntarnos si me siento bien con lo que estoy haciendo, estaré haciendo lo correcto hasta ahora, podre mejorarlo y aun estaré a tiempo de corregir para poder seguir. !...La vida se nos pasa tan rápido que no nos damos cuenta en que momento sucedió y en donde me perdí en mi vida..!
what does this post even say
LOL