En el mundo para ser felices.
La razón por la que vinimos al mundo fue a ser felices. A mirar los amaneceres y admirar el color con el que se pintan los cielos.
Siempre se debe ser bueno, tratando de dar lo mejor de cada uno, porque el que hace el bien, eso recibe. Es ley de vida que todo lo bueno se multiplica, se comparte y hace que seamos más.
¡Sé bueno!
Sumando es que llegamos a ser más fuertes, en familia es que logramos ser un todo. Aunque a veces sucedan cosas difíciles en el camino la gente buena, la gente que ama es la gente feliz.
¡Sumar para ser más fuertes!
Tal cual los ángeles de Dios, hechos a su imagen y semejanza son belleza y fortaleza porque en ellos no reside la maldad. Así debemos ser para ser felices, ser ángeles dispuestos a ayudar, a colaborar con el prójimo siempre que necesite de nosotros.
Porque la maldad empobrece, trae soledad, la maldad al final de los días es la que lleva a que algunas personas no te ganan con quien conversar o de quien apoyarse. Es triste que algunos decidan ir por el mundo haciendo mal cuando hay tantos necesitando amor.
Una persona buena es respetuosa, quiere a las mascotas, respeta a los demás, es sincera. Y ama, ama profundamente dejando ver que su sonrisa es motivada por sentimientos fieles, por afectos sinceros.
¡Sé respetuoso!
El bien es la lógica que mueve el mundo.
¡Tú eres el bien!
Cariños con energías positivas nuevamente por acá.
de… @emeser
Tu escrito nos lleva a una profunda reflexión de como llevar nuestra vida por el sendero de la vida. Me encantó.
No sé si vinimos al mundo para ser feliz; decir que hemos venido para algo en específico es muy determinista, pero la felicidad es ciertamente uno de los fines que el ser humano busca y por el cual emplea muchos de sus esfuerzos.