Muy a menudo, acuden a mi consulta pacientes con indicaciones para realizarse una cirugía nasal, con una serie de dudas constantes ¿será que quedaré bien? ¿dejaré de sufrir de sinusitis? ¿dejaré de roncar?

Todas estas inquietudes son totalmente normales, en virtud de tratarse de experiencias desconocidas (para la gran mayoría de ellos). Sin embargo, otros han tenido que hacerlo en más de una ocasión. La presente publicación pretende dilucidar los factores que pueden incidir en esos resultados y responder esas interrogantes.

Fuente: Imagen Inédita, capturada con dispositivo Samsung y editada con el programa Microsoft Power Point

En primera instancia es necesario tener claro, que estos resultados van a depender de tres factores principales:

• Síntomas del paciente: obstrucción nasal constante, dolor facial, anosmia o hiposmia (no percibir o percibir poco los olores, disfonía, cefalea (dolor de cabeza), alteraciones visuales, otitis media de efusión, hipoacusia, entre otros.
• Signos clínicos: Rinodeformidad, desviación septal, hipertrofia de cornetes inferiores o medios, pólipos, otras lesiones nasales.
• Respuestas al tratamiento médico: falta de respuesta al tratamiento médico; episodios infecciosos frecuente de más de 3 meses de evolución, complicaciones orbitarias.
• Hallazgos en los estudios endoscópicos y tomográficos: espolones, crestas, áreas de fracturas; senos paranasales ocupados por quistes, pólipos, rinorrea fétida (moco nasal), otras lesiones.
• Fotos clínicas: paciente con asimetrías faciales o disconformidad estética.

Las cirugías nasales se hacen con tres propósitos principales:

• Para mejorar el aspecto estético.
• Para mejorar el funcionamiento de la nariz.
• Cuando se desean ambas cosas.

_{Fuente: Imágenes Inéditas, capturada con dispositivo Samsung y editadas con el programa Microsoft Power Point}

Tener claras las razones por las cuales el paciente se va a operar es muy importante. Esto va a definir el manejo quirúrgico y permitirá planificar la técnica quirúrgica, el tipo de instrumental quirúrgico y otros materiales médicos. De esta manera, se reducirá al máximo las posibles eventualidades que puedan surgir, tanto en el momento de la cirugía, como posterior a ella.

Cirugía Funcional Nasal

La cirugía funcional nasal se puede realizar de forma convencional y usando técnicas endoscópicas.
Cuando el paciente presenta septodesviación nasal, con presencia o no de espolones, crestas e hipertrofia de cornetes inferiores, se puede realizar una cirugía funcional nasal convencional, o endoscópica si así lo prefiere el especialista.

_{Fuente: Imágenes Inéditas, capturadas con dispositivo Samsung}

La endoscopia nasal en el diagnóstico de las diversas patologías nasales, así como, en la resolución de las mismas, ha sido una gran aliada para lograr resolver las alteraciones inflamatorias crónicas (rinosinusitis) y anatómicas que podemos hallar en la cavidad nasal y paranasal.

Hoy en día, no se justifica realizar cirugías que involucren los senos paranasales, sin la ayuda de los equipos de fibra óptica. Estos junto a instrumental especial, te permiten acceder hasta la base del cráneo y limpiar las cavidades que están siendo afectadas por presencia de moco, pólipos, quistes o tumores; casos en los que utilizando las técnicas convencionales no garantizarán el éxito quirúrgico.

_{Fuente: Imágenes Inéditas, capturadas con dispositivo Samsung, con el permiso de las pacientes}

Las imágenes anteriores corresponden a tomografías de senos paranasales, donde se evidencia presencia de quistes de retención, pólipos, desviación septal, cornetes medios bullosos, hipertrofia de cornetes inferiores, engrosamiento de la mucosa septal; que reflejan una rinosinusitis crónica.

_{Fuente: Imagen capturada con dispositivo Samsung}

En estos casos, donde se evidencie ocupación de los senos paranasales en forma crónica, con rinorrea constante, gruesa y pólipos; se debe realizar una cirugía funcional endoscópica, con toma de muestra de tejido (biopsia) para determinar la naturaleza de la lesión y así planificar algún otro tratamiento posterior, puesto que nos podemos llevar sorpresas desagradables.

Cirugía Estética Nasal. Rinoplastia-Rinoseptoplastia

El paciente puede desear solo una modificación del aspecto estético de su nariz, es decir, no le gusta el ancho, la altura, la proyección o rotación de la punta nasal, o sus alas nasales son muy anchas; en resumen no está contento con la forma de su nariz. En ese caso se realizaría, una rinoplastia y si además hay alguna desviación del septum nasal o hipertrofia de cornetes inferiores, se llamaría entonces rinoseptoplastia.

Para realizar este tipo de cirugías lo ideal es que el paciente haya alcanzado la madurez física, haya superado la pubertad. Sin embargo, si el paciente es menor y el cirujano lo decide, puede hacer la cirugía sopesando el riesgo beneficio.

Existen dos técnicas principales, Abordaje Abierto , en el cual se hace una pequeña incisión en la columella, prácticamente imperceptible, y Abordaje Cerrado, que no deja ningún tipo de cicatriz, porque las incisiones van por dentro de la nariz. El uso de una u otra técnica, va a depender del gusto, la experiencia del cirujano y los cambios que requiera hacer en la estructura nasal.

_{Fuente: Imágenes Inéditas, capturadas con dispositivo Samsung, con autorización de las pacientes}

En las imágenes precedentes observamos dos pacientes. La primera tenía la punta globulosa, ancha, mal definida y sin proyección, ella quería mejorar la nariz pero con cambios sutiles.

La segunda tenía una nariz, a tensión, producto de un traumatismo nasal en la infancia; donde hubo crecimiento óseo y cartilaginoso, no acompañado de estiramiento de la piel, por lo que desarrolló un dorso nasal alto y ancho, con una giba dorsal; ella por supuesto quería cambiar totalmente esa forma.
Si observamos el "después" de cada una pueden notar que en la primera hicimos cambios sutiles y en la segunda cambios radicales, de hecho la paciente número dos parece otra.

Es muy importante conocer qué le molesta o no le gusta a la paciente de su nariz. Tener claras las expectativas del paciente es vital para el especialista que realiza estas cirugías, y establecer con antelación los posibles resultados, pues de lo contrario pasará momentos incómodos.

¿Tendré que usar taponamiento?

Actualmente, se usan las férulas nasales, sin embargo, en algunos casos en los que se haya extirpado alguna lesión tumoral o pólipos, se requerirá un taponamiento nasal por dos o tres días.
Las férulas endonasales también llamados splint nasal, van a permitir al paciente respirar durante el postoperatorio inmediato. A través de estos, el paciente se realizará lavados nasales con solución fisiológica para evitar que se obstruyan.
Estos dispositivos se dejarán durante al menos una semana, todo va a depender de los hallazgos quirúrgicos.

¿Es una cirugía dolorosa? ¿Me voy a hinchar? ¿Me van a salir moretones?

No es una cirugía dolorosa, el paciente solo tendrá molestias leves a moderadas luego de la cirugía nasal, que suelen ceder con analgésicos comunes.

En el caso de cirugías estéticas, por la necesidad de fracturar huesos nasales, se presentarán moretones alrededor de los ojos, los cuales desaparecerán en las primeras semanas y no son signos de alarma.

No quedan cicatrices cuando se realiza un abordaje cerrado y en los abordajes abiertos, la cicatriz e imperceptible al cabo de unas semanas.

Todo lo anterior refleja que para garantizar los resultados de una cirugía nasal es necesario, tener claro estos factores:

Diagrama propio

En cualquier caso, lo importante es que el paciente haya esclarecido las dudas con su médico tratante y tomado en cuenta cada uno de los detalles de su cirugía y del manejo posterior a esta, es decir, todo lo concerniente a tratamiento médico, dieta, reposo físico, evitar la exposición al Sol y el uso de recubrimiento nasal con adhesivos.

El paciente debe comprometerse a participar activamente en los cuidados postoperatorios, acudir a las consultas, para realizarse las curas y notificar a su médico cualquier eventualidad.

No menos importante son las expectativas del paciente en cuanto a los resultados estéticos, puesto que así se evitará inconvenientes y molestias. La empatía es imprescindible, así como la confianza para manejar los posibles detalles finales que requieran afinarse.

Soy Eadams, médico otorrinolaringólogo, hasta un nuevo encuentro .

Referencias

• Behrbohm, H; Tardy, E. (2005). Elementos Esenciales de la Septorrinoplastia. Filosofía-Abordajes-Técnicas. Traducción al castellano por Amolca. Colombia.
• Marks, S. (2001). Nasal and Sinus Surgery. W.B Saunders Company. Philadelphia. Pennsylvania.

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Todas las imágenes y casos clínicos son de la autora.