Sabes que, ¡Hablemos de juicios de valor!
Una de las capacidades del ser humano es opinar, opinar de todo así apenas sepamos cual es del tema a analizar, sin embargo, este proceso lo realizamos atendiendo varias constantes inducidas desde nuestra propia condición, naturaleza o cultura, de manera que cuando opinamos sobre algo inconscientemente nos situamos en tres grandes aspectos sobre el cual operamos; la percepción, el estereotipo y la referencia. (Esto no quiere decir que no existan otras)
La percepción; uno de los aspectos sobre el cual generamos juicios de valor que parte del hecho de como entendemos el mundo, donde la cultura; entendida desde tres componentes, la estética, la social y la psicológica hacen que nos expresemos sobre algún tema o punto de vista, es un aspecto que a ratos puede ser muy dogmático porque a veces no entendemos porque pensamos así, solo pensamos así! Pareciera que la lógica no apunta mucho acá. De manera que es un componente muy vulnerable, usado por políticos y especialistas en mercadeo, a veces somos conejillos de indias para conocer, como estrategias de mercado casi nos obligan a marchar al ritmo de la música que nos toquen.
El estereotipo aunque deriva del concepto anterior, lo señalamos porque su condición de exageración le da su propio peso específico, su cualidad de simplicidad le concede mucho poder a la hora de decir algo cuando solo creemos saber debido a esa etiqueta que alimentamos diariamente durante años, fue importante en la Alemania nazi para la manipulación de las masas y hoy por hoy, procura influenciar para mejorar la imagen de regímenes políticos, filosóficos o culturales.
La referencia; es quizás el menos malo de los tres y parte del hecho de un análisis comparado entre lo que pretendemos razonar con otro elemento similar o relacionado que nos permite evaluar distancias tanto cualitativas como cuantitativas. La referencia en el ámbito académico es muy común en algunos estudios comparados, donde desde la teoría de los estados ideales o del deber ser fijamos posición con la realidad para opinar.
En algunos casos de juicios de valor usamos una o varios de estos aspectos, combinándolos sin que seamos conscientes de ello, pero que resultan debido al hecho que son fáciles de instaurar y de producir resultados rápidos.
Ahora me gustaría saber tu opinión sobre como generas juicios de valor y si usas estos tres aspectos o usas algún otro.