LAGRIMAS Y UN GRACIAS LA SATISFACCIÓN DE AYUDAR

Hola a todos y a todas saludos, como ya lo he mencionado antes soy bombero profesional con cinco años de carrera, el trabajo de bombero no es fácil y se nos presentan casos unos más difíciles que otros que a veces nos marcan y no se olvidan.

FUENTE foto tomada con telefono personal blakcberry curve 9360.

Tal es este caso que se nos presentó hace ya dos años, estando de guardia llega a la estación una muchacha pidiendo de nuestra colaboración para poder inyectar a su hermano mayor un sedante pre-escrito por su medio tratante. Nos asignan esa tarea a mi persona y a otro compañero, al llegar a la casa nos dice la muchacha “ tengo que comentarles algo de suma importancia que no mencione por pena”, ella nos cuenta con mucha pena que su hermana tiene que inyectarse tres inyecciones una para sedarla, la segunda para su esquizofrenia y la ultima es que su hermana está contaminada con VIH positivo mi compañero y yo nos vimos las caras no nos esperábamos eso.

Nos sigue comentando que después de una relación de meses con su novio se entera de que tenía VIH positivo, y al recibir esa terrible noticia y pensando que se iba a morir entro en un estado de shock emocional y llevarla a ese estado de esquizofrenia, que cuando no se medica se pone agresiva. Hasta nos di permiso de atarla si era necesario para poderla inyectar, mi compañero y yo tomamos los toros por las riendas como dicen coloquialmente.

Tratando de hablar con ella cada vez se ponía más agresiva nos confundía con policías, por más que tratábamos de convencerla de que somos bomberos no nos creía; optamos por quitarnos nuestra chaqueta del uniforme y cubrirnos las botas hay si pudimos hablar con ella y convencerla, dejándose inyectar solo por mi sin necesidad de atarla o forzarla.

Su hermana agradecida llorando nos da las gracias, que la disculpemos por no habernos informado hasta llegar a la casa, porque anteriormente se había dirigido a protección civil y le dijeron que primero la sedara porque era un riesgo, es tanto su agradecimiento que todos los años el 20 de agosto día nacional del bombero va con una torta y comparte con nosotros en la estación.

Así que reflexionemos un poco no discriminemos por color, creencias y menos por una enfermedad no somos Dios para juzgar, ayudemos así sea escuchando a la persona y recibamos esas gracias del corazón que sin las que nos hacen crecer como personas y profesionales.

Recuerden marquemos la diferencia el saber es querer, gracias por haberme leído.