Hola hermana @fatimajunio, Dios le Bendiga
Los Cristianos de acuerdo a la palabra, para unirse en el Sagrado Matrimonio, deberían hacerlo con una persona que además de conocer bien, deberían compartir gustos y costumbres, deberían compartir lo que a mí me parece lo más importante al momento de tomar la decisión de unirse en matrimonio: la Fe Cristiana, deberían pertenecer a la religión Cristiana, ya que ello garantizaría que ellos no tendrían problemas en lo que respecta al acatamiento de las leyes escritas en la Biblia.
Ya que si ellos están regidos bajo las leyes de nuestro Señor tal y como lo establece en:
CORINTIOS 7:15

Sin embargo, si el que no es creyente se separa, que se separe; en tales casos el hermano o la hermana no están obligados, sino que Dios nos ha llamado para vivir en paz.
Ahora bien, si el esposo o la esposa no creyentes insisten en separarse, que lo hagan. En estos casos, el hermano o la hermana quedan en libertad, porque Dios los ha llamado a ustedes a vivir en paz.
Pero si el incrédulo se aparta, apártese; que el hermano o la hermana no está sujeto a servidumbre en semejante caso; antes a paz nos llamó Dios.

Esta es la situación que se presentará si alguno de los esposos no es Cristiano y Creyente. Todos esto se evitaría, desde un principio sabiendo que ambos respetan las leyes y Dios Bendecirá y regirá en forma armoniosa su hogar y a los Hijos que procreen estas personas. Pero muchas personas al desesperarse esperando, piensan que no va llegar la persona que desean y por su impaciencia pueden llegar a decidir a casarse con alguien que no sea cristiano con las consecuencias que ya hemos leído.