Cont.Original // Tolerancia ¿signo inequívoco de paz interna?
La tolerancia como valor intrínseco del ser humano ha ido evolucionando lenta y proporcionalmente a medida que llega más información a nuestras manos, habida cuenta de la exposición a la conectividad y el consumo de información. Sin embargo hay muchos desafíos por delante que nos hacen preguntar sobre los procesos de pensamiento de cada persona y la manera de percibir comportamientos o individuos diferentes a los que uno es capaz de aceptar, según sus creencias y modelos referenciales.
Esto es así, porque creemos que se es tolerante muchas más veces por indulgencia o por indiferencia que por verdadera empatía, lo cual significa poder brindar humanidad por encima de las preferencias.
Luchar contra la intolerancia va más allá de marcos legales impuestos por los gobiernos o la aceptación en las comunidades.
Cuando Matthew Shepard salió de su casa el 6 de Octubre de 1.998 ignoraba que jamás regresaría a salvo. Este activista de la comunidad LGTB en Laramie, Wyoming se reuniría con sus amigos para organizar la semana de concienciación sobre los colectivos y las personas con distinta orientación sexual a las generalmente aceptadas. Una vez terminado el encuentro, quería celebrar su felicidad por haber llevado a término la planeación de la actividad, pero ninguno de sus amigos le acompañó al bar que selló su destino.
Contrariamente a lo que piensan los activistas, la tolerancia no se decreta o se impone colectivamente. Es verdad que las organizaciones creadas para tal fin, han logrado avances en la imposición de una agenda colectiva que ha hecho mucho ruido, pero realmente no ha ayudado sino que ha generado más indulgencia o indiferencia, según nuestra percepción.
No en balde, tolerar es un valor individual; muchas veces en la historia se condenaron grupos raciales, de orientación sexual o de género a partir de la visión de un solo líder. Y en los líderes es donde descansa la responsabilidad de crear conciencia tolerante.
Acudir a la educación individual empática y sincera acerca de la forma de pensar, los retos y esperanzas que tienen estos grupos de personas, ayudará a combatir la ignorancia, el miedo y la descalificación de tales individuos.
Esa noche, dos obreros de construcción que se hicieron pasar por gays para ganar la confianza de Matthew, mediante engaños sobre un posible encuentro, lo raptaron de ese bar con el fin de robarle. Una vez que llegaron a un sitio apartado, lo agarraron entre ambos y lo amarraron a una cerca de troncos con una cuerda de tendedero y lo golpearon salvajemente con la cacha de un revólver hasta dejarlo agonizante, 18 horas después fue descubierto por un adolescente que se cayó de su bicicleta y lo vio pensando que era un espantapájaros.
Considerar que las condiciones socio-económicas cambiantes y que no se pueden controlar, son causantes de la dispersión geográfica de personas con las que los gobiernos y las sociedades tienen que lidiar, es otra arista sobre la tolerancia hacia el inmigrante que nos hace pensar que hoy, más que nunca, necesitamos crear niveles de empatía acordes con los nuevos tiempos.
¿Es la solidaridad el camino hacia la empatía y la tolerancia? No necesariamente, porque una cosa es comprender y ayudar y otra -muy diferente- es imaginarse pasando por ese mismo trance o condición.
Es aquí donde se encuentra el meollo del tema, se es tolerante porque... ¿se hace por convicción o por tomar parte de una indulgencia e indiferencia provocada por la aceptación social?
Cuando la sociedad estadounidense se enteró de los detalles sórdidos del asesinato, la indignación exacerbada por los medios y una incipiente World Wide Web, tomó una fuerza considerable: la mayor vigilia colectiva que se recuerde hasta ese momento por la muerte de alguien perteneciente a la comunidad LGTB, realizada en las escaleras del Capitolio en Washington D.C., tuvo como participantes a celebridades y políticos, muchos hogares encendieron velas a lo largo del país y el presidente Bill Clinton acusó a los atacantes de estar «llenos due odio o llenos de miedo o de ambos».
Siempre hemos defendido la inteligencia emocional como el camino hacia el manejo de muchas de las emociones personales, cuando es usada para crear empatía hacia grupos de personas que no comparten nuestras creencias, se da un paso en la dirección correcta.
Pero también debe ser usada como un arma que nos eduque en los sentimientos y las creencias que abrigan millones de personas con una conciencia y concepción diferente sobre un mundo que se muestra hostil, cada vez que ellas comparten sus pensamientos, debilidades o infortunios.
Creer que se es tolerante por el sencillo hecho de «vivir y dejar vivir», no es un acto de responsabilidad consigo mismo, puesto que la aceptación de un mundo multicultural y multicolor forma parte de una paz interna adquirida como consecuencia de una valoración sincera sobre la humanidad y las creencias.
Cinco días después de su muerte, Matthew fue cremado y sus cenizas reposan en la catedral de Washington, hogar donde descansan los restos de próceres y personalidades muy destacadas de la sociedad estadounidense. Tal fue el impacto y horror que causó su muerte a la temprana edad de 21 años. Y un par de decenios después, la BBC calificó su historia como «el asesinato que cambió a los Estados Unidos».
Cualquiera podría pensar que tiene suficientes problemas personales como para tener que atender a una necesidad que no es propia, por el simple hecho de no compartir posiciones y creencias.
Pero congraciarse con la humanidad, pasa, precisamente, por dar una dirección y sentido a aquellas cosas que nos hacen ser como somos y la empatía hacia un animal -por dar un ejemplo- jamás podrá estar por encima de las personas que luchan por ser comprendidas, aceptadas y toleradas.
Si no, Matthew Shepard habrá muerto en vano y no merecemos honrarle.
Si te gusta nuestro contenido,ven y apoya a @Cervantes como Witness en
interesante articulo y muy asertivo la tolerancia esta cada vez mas ausente de los seres o personas, sin embargo es un valor, y cualidad que todos buscamos en los demás sin darnos cuenta
Excelente exposición sobre la tolerancia. Engranando la parte conceptual con la jistoria de Matthew