Para mediados del 2014, durante el mundial de Brasil en un viaje a Fortaleza decidí quedarme en la Gran Sabana por un periodo muy corto lo que conllevo a realizar tomas únicas en mi vida, entre las mas recordadas esta la visita a la casa de los cristales en Santa Elena de Uairen recordando a la señora María y su esposo quien muy cordialmente me invitaron a entrar a su hogar. al entrar vi un lugar magnifico para tomar capturas era una sala muy amplia con gran diversidad de cristales. pero el asombro no quedo allí, ya que al ir a su patio trasero recuerdo quedar pasmado por el cambio de luz intensa que venia de tantos cristales lo que llevo a replantearme la sesión.

Al entar al patio trasero de tan magnifico lugar recuerdo de manera significativa poder ver un poco morado por el cambio de luz lo que me genero la idea de llevar ese tinte en las imágenes a partir de un purpura cenizo que era lo mas indicado para caracterizar ese espacio. Según relatos contados por los dueños del lugar, el portal hace reverencia a antiguos portales encontrados en la Gran Sabana pertenecientes a los "Sunkies" o aquellas criaturas que visitan la tierra dese el mas alla.

Al comenzar a tomar fotografías se me ocurrió ir creando ese tinte purple característico para el lugar , donde intento expresar aquel misticismo sentido con un poco de miedo hacia lo desconocido. Esperando con devoción que llegara el atardecer para poder observar el reflejo de la luz naranja en los cristales, lo que le dio una mayor intensidad al purpura.

La magnitud de asombro era cada vez mayor llevándome a adentrarme dentro del portal a partir de tomas características donde se singulariza sus componente, siendo las bases y luces su mayor atractivo. Es te es un lugar magnifico para meditar y buscarse a si mismo con tranquilidad y paz junto a los cristales.