Por fin brotaron nuevas ideas para redactar un post con un contenido que estuvo rondando por mi cabeza durante varios días. Muchos se preguntarán, ¿por qué sigo en Steemit? o, ¿porque esta mujer?, pues mucho tiene que ver con la increíble afirmación que plasmé al inicio. Muy sabio Gandhi, por eso sigue siendo inolvidable porque trascendió. Una vez coloqué en un post que podemos controlar los pensamientos y lo que hacemos, pero no el resultado, éste debes soltarlo porque no dependerá de ti aunque creas que si, es totalmente impredecible. Cada esfuerzo por muy pequeño o grande que sea, valdrá la pena, el tiempo y la victoria, independientemente del resultado final. Es como la vida, la vives aunque sepas que vas a morir. Tú decides que deseas hacer con ella, cómo experimentarla, qué elegir, aún desconociendo que te traerá de vuelta.

Por eso aún, hasta ni yo me lo creo, sigo en Steemit, porque a pesar de que he sentido en los últimos dos meses como esa GRAN FIESTA que se dio no hace mucho y todo el mundo asistió, llena de globos de colores, grandes mesas, mucha comida, todos celebrando, bebidas por doquier, iban llegando cada vez más personas, cuando de repente, la fiesta ha terminado y te queda recoger los vasos rotos, los globos desinflados, las botellas vacías, la esencia de lo que fue la furia del momento, quizás demasiado instantánea o efímera, pero ves que sigues estando allí, con pocas personas limpiando ese gran salón, recogiendo los desechos de lo que una vez fue LA MEJOR FIESTA PARA TODOS. Pero sigues allí porque no estuviste nunca por la fiesta realmente, si asististe y te la gozaste, pero sigues siendo presencia y sigues apostando por tu esfuerzo aunque muchos hayan partido para no volver, o simplemente dejaron de creer. En fin, las eternas expectativas humanas.

Sigo en Steemit porque cuando comencé era una niña aprendiendo a nadar en la orilla, solo conocía otros blog, y sobre redes sociales: instagram, facebook, entre otros, etc, pero nunca una plataforma como esta. Me deslumbró su prestigio y su cristalino océano para conocer miles de peces diferentes y cuidado tropezarme cuando menos lo pensara con una ballena. Un animal hermoso que en la realidad es una de las especies más elevadas en cuando a animal se refiere. Por eso aquí dícese: el que llega lejos o se hace grande, se le llama BALLENA, pero es que una ballena no solamente es grande, es noble, sabia, hermosa, se distingue por su imponente naturaleza y sabe lo que quiere para mantenerse en su océano. Con la rudeza si es necesaria de usarla si alteran su entorno, cosa que me fascina porque realmente es una especie equilibrada, tenaz y difícil de ver en cualquier océano. Retomando el inicio de este párrafo, fui aprendiendo a nadar, a bucear, a conocer a otros peces que me enseñaron, me ayudaron y se los agradezco, soy escasa con muchas herramientas de la tecnología, pero me ayudó a salirme de mi zona de confort y lo que he logrado pulir con mi escritura mucho se lo debo a esta plataforma. También me siento agradecida de que se me de siempre la oportunidad de ayudar a otros, creo que eso aquí es clave para que se mantenga la interacción y el equilibrio.

Buscando hacerme entender en este contexto, sigo en Steemit a pesar de que ha decaído en muchos aspectos y en otros ha mejorado, porque para mi Steemit es como un gran periódico, no solo una red social (de hecho nunca la vi así) quizás siempre nado contra la corriente y aunque quise encajar, siempre lo que más me ha gustado de permanecer en Steemit es la diversidad, la oportunidad, la calidad, la perseverancia de todo aquel que desea escribir. Eso es lo que se hace en un periódico, te ganas un espacio llamado columna, asumes tu estilo de lo que vas a escribir, y aunque se venda mucho o no ese periódico, tienes la responsabilidad de mantener tu columna impecable y en constante cambio, o mejoramiento, eso es libertad y responsabilidad para mi de ese espacio que te ganas con la constancia.

Escribo en mi columna y allí siempre se quedará cada post o arte que yo haya publicado, y sé que mi esfuerzo nunca ha sido ni será en vano, porque me siento a gusto hasta donde he llegado, lento pero sin rendirme. Por ello si es realmente importante tener una reputación, y no hablo de la que te colocan aquí, que si 44, 50, 58, 60 o 75, uno sabe cuando alcanza una reputación digna no necesariamente la determina esas cifras (he visto contenidos impecables, profesionales y tienen 42 poniendo un ejemplo) y debes mantenerla o aumentarla, jamás permitirte bajarla, la has ganado con tu esfuerzo, y el resultado por favor, que no te quite el sueño, tenlos y abrázalos para amar, viajar, ser mejor persona, aprender un idioma nuevo, para crecer. Escribir o desarrollar cualquier contenido, es libertad de expresión. No les negaré que a veces me he desanimado pero ha sido más por problemas personales y sobre todo por lo que atraviesa mi país que la pasión por escribir. Eso nunca desaparecerá en mi, sea aquí o en otra parte, siempre escribiré.

Así que si asististe a la GRAN FIESTA y quieres participar en recoger lo que quedó de ella, te admiro por tu decisión, así como respeto quien haya decidido alejarse o simplemente aparecer de vez en cuando. Igualmente sé de los muchos peces que admiro y los que ya no están los extraño demasiado. Su columna era brillante y me nutrieron tanto que por eso su esfuerzo jamás pasará a la historia, lo que se escribe aquí queda, tengan eso muy en cuenta, que es así. Por ello, cuida la reputación que tengas, ella define tu trabajo y lo que has logrado que te lo debes mucho es enteramente a ti.